Suspenso, emoción y una incansable voluntad para ir hacia adelante fueron los condimentos del clásico de Menores de 16 entre La Tablada y el Tala, el sábado en El Bosque.
Parecía que el triunfo era para los blanquinegros, pero sobre el final los locales terminaron cerrando una ajustada victoria por 15 a 13.
Tala, que comenzó haciendo un gran trabajo en la limpieza de los rucks y reagrupamientos en ataque, se puso al frente a los 5 minutos de juego a través de su apertura Agustín Ordóñez, quien tras una buena maniobra colectiva llegó al try. La conquista estuvo lejos de amedrentar a La Tablada que llevó el juego al campo de su rival y consiguió anotar, siete minutos más tarde, por intermedio del tercera línea Juan Ignacio Gardey. Un penal y la conversión del fullback Tomás Van Hendren los puso arriba 10 a 5.
En la segunda etapa fue Tala el que se instaló en terreno adversario en busca de emparejar las cosas. Sin embargo, la gran defensa del local no le permitió llegar a su objetivo hasta los 27 minutos, cuando un error de la defensa le dejó servido el try a Facundo Pacheco y los blanquinegros volvieron a pasar al frente, esta vez por 13 a 10.
A esa altura el marcador parecía cerrado; sin embargo, los azulgranas, sin darse por vencidos, salieron a jugarse el resto. Esta actitud fue premiada en tiempo de descuento y, cuando todos pensaban que la victoria sería de los de la salchicha, el tercera línea Gustavo González (uno de los mejores del conjunto azulgrana) haciendo un impecable redoble recibió de un compañero y no paró hasta zambullirse en el in goal.
El pitazo final del árbitro Beazutti hizo estallar de alegría a los locales, que tras esta victoria se afirman en la cuarta ubicación con un partido menos. Los blanquinegros, por su parte, se retiraron de El Bosque masticando bronca por la derrota pero con la tranquilidad de saber que dejaron todo dentro de la cancha.
La nota decepcionante de la tarde la dio el público que, a diferencia de los jugadores, tuvo un pésimo comportamiento.
Fuente: suplemento Rugby&Golf