El choque entre los seleccionados de Argentina y Estados Unidos mostrará dos equipos sin chances de pasar a la siguiente instancia, pero con posibilidades de clasificar a la próxima Copa del Mundo del 2023.
Argentina y Estados Unidos no tendrán tiempo para lamentos. El partido que los enfrentará el 9 de octubre, desde las 13.45 en el Kumagaya Rugby Stadium, pondrá en juego las aspiraciones de clasificación directa para la próxima Copa del Mundo, a pesar de estar descartados para la vigente edición de Japón, una vez que termine la etapa de grupos.
Los Pumas están terceros en el Grupo C, con 6 puntos, sin oportunidad matemática de pasar de ronda y Estados Unidos no ha sumado, tras dos caídas, pero tiene un partido menos, por lo que dos eventuales victorias (ante Argentina y Tonga), le permitirían alcanzar la tercera posición que otorga el boleto directo a la cita en Francia 2023.
La nota emotiva del encuentro estará centrada en Juan Manuel Leguizamón, quien tras el Captain’s Run, anunció que este será su último partido con la camiseta de Los Pumas. El tercera línea está alcanzando su cuarta Copa del Mundo, habiendo debutado en Francia 2007, cuando Argentina consiguió el tercer puesto.
Historial con gauchos dominantes
Estos países se han enfrentado en ocho oportunidades (nunca en una RWC) y hasta el momento, Argentina logró imponerse en todas.
Hace 16 años que no se ven las caras y la última vez que lo hicieron fue en el viejo estadio del Buenos Aires Cricket and Rugby Club, ante 6.000 espectadores. El equipo que dirigía Marcelo Loffreda junto a Daniel Baetti goleó a los Eagles por 42 a 8. En Los Pumas el capitán fue Lisandro Arbizu, mientras que en el equipo del Norte debutó Todd Clever, el jugador con más caps en la historia del rugby de ese país (76 tests). Ese día, Los Pumas anotaron seis tries y 12 tantos con el pie de Felipe Contepomi. La curiosidad de la tarde fue que en el banco de suplentes argentino quedaron sin ingresar Gonzalo Longo, Rolando Martin y Agustín Pichot, tres de los jugadores con más caps en la historia del rugby argentino.
El presente de los dos tiene puntos en común. Los norteamericanos acarrean dos derrotas en igual cantidad de presentaciones. Primero fue la caída por 45-7 frente a Inglaterra, en Kobe; y luego la segunda ante Francia por 33-9, en Fukuoka.
Además del choque con Argentina, le queda la última cita, también en Kumagaya, ante Tonga el 13 de octubre, para intentar romper el maleficio de caídas en Mundiales que arrastra desde Nueva Zelanda 2011, donde consiguió su última victoria al vencer a Rusia por 13-8.
Del lado argentino, el último golpe sufrido ante Inglaterra, con quien cayó por 39-10 en Tokio, terminó por sepultar sus aspiraciones de entrar en cuartos de final, dejándolo afuera del torneo en esta instancia, algo que no ocurría desde la RWC 2003 en Australia. Los Pumas disminuyeron sus chances en el debut ante Francia, donde perdieron 23-21 en el Tokyo Stadium, a pesar de reponerse con Tonga una semana después, consiguiendo una victoria por 28-12, en Hanazono Rugby Stadium.
Equipos con variantes
El equipo de Mario Ledesma, décimo en el ránking, realizó 9 modificaciones con respecto a los últimos 23 hombres convocados ante Inglaterra.
Con el compromiso de ganar y empezar a proyectar la próxima Copa del Mundo, Los Pumas tendrán en cancha a Juan Manuel Leguizamón, que estará debutando en su cuarta Copa Mundial de Rugby, mientras que el apertura, Nicolás Sánchez, regresa como número 10 después de haber quedado marginado con Inglaterra.
“Hay 16 de los chicos que hicieron su debut en RWC este año y van a aprender mucho de esta experiencia”, dijo Ledesma, y en ese sentido estarán dentro de los 23, el wing de 22 años Bautista Delguy, el pilar Santiago Medrano, y el fullback Juan Cruz Mallía – ambos de 23 años. También Mayco Vivas y Santiago Carreras, de 21 años. Matías Alemanno estará desde el inicio como segunda línea tras la suspensión que recibió Tomás Lavanini luego de su expulsión ante Inglaterra.
En el lado norteamericano, también realizó algunas modificaciones su entrenador sudafricano Gary Gold, un veterano en la dirección de numerosos clubes y provincias de primera línea en su país, en Japón y en Inglaterra, quien también fue asistente de Peter de Villiers en los Springobks, entre 2008 y 2011.
Los tres cambios respecto a su formación en el partido anterior serán la presencia del medio scrum Ruben De Haas, el segunda línea Greg Peterson, y el centro Paul Lasike, en lugar de Shaun Davies, Nick Civetta y Martin Iosefo, respectivamente. Iosefo se sentará en el banco junto a Davies, mientras que Civetta no figura entre los 23 seleccionados.
Estados Unidos es el segundo equipo con peor producción ofensiva en lo que va de la Copa, con sólo 16 puntos marcados en sus dos presentaciones, por encima de Canadá con 7; en tanto Los Pumas tienen 59. También es el equipo con menos quiebres limpios en el torneo, con 6, mientras que Argentina tiene 19 (6 de Santiago Carreras) en la tabla que lidera Nueva Zelanda con 71.
En cuanto al juego, si Argentina logra la consistencia que tanto ha buscado en esta Copa y que apenas apareció en el segundo tiempo ante Francia y el primero contra Tonga, debería lograr imponerse. Su defensa no ha sido óptima en la efectividad de los tackles, pero viene en franca mejoría, y tiene a Marcos Kremer como el abanderado en ese rubro, apenas un tackle detrás del samoano TJ Ioane, que lidera ese ranking con 49.
Ventana al futuro
El joven Rubén De Haas, con sus 22 años, encarna la nueva era de jugadores de Estados Unidos. Iniciará ante Los Pumas como titular por primera vez en el seleccionado de EE.UU., tras causar una buena impresión en sus participaciones como suplente ante Inglaterra y Francia.
De Haas, sudafricano de origen, reemplazará a Shaun Davies, también originario del mismo país, que a sus 30 años va dejando el legado para quienes seguramente estarán en la Copa 2023.
De Haas tiene el prototipo del medio scrum sudafricano con un tamaño por encima de la media (183 cm, 84 kg) y mucho potencial para explotar en sus incursiones personales y el uso del juego con el pie.
Del otro lado, Argentina pondrá en cancha a Juan Cruz Mallía, que con 23 años, también forma parte de la nueva generación, en que Los Pumas tiene depositada su confianza hacia el futuro.
El jugador polifuncional, que transitó el camino de selecciones juveniles (jugó en dos ediciones de la Copa del Mundo Juvenil siendo capitán en una de ellas), participó en Argentina XV, Jaguares, Pumas y ahora está disputando su primera RWC, avizora un futuro certero de cara a Francia 2023.
La palabra de los protagonistas
“Estamos muy hambrientos de ir tras Argentina”, declaró el hooker Dylan Fawsitt, un ex tercera línea nacido en Irlanda que se sumó a las filas norteamericanas. Además, agregó: “Terminar terceros y clasificar sería maravilloso para el rugby de Estados Unidos. Queremos conseguir esto ahora para que nos brinde todas las oportunidades para que el juego tenga éxito en el futuro”.
“Definitivamente hay un desafío por delante. Ahora tenemos que salir y ejecutar”, concluyó.
Del otro lado del vestidor, Juan Cruz Mallía, uno de los jóvenes debutantes en la Copa del Mundo, expresó: “Son sensaciones encontradas porque quedamos eliminados de un Mundial, pero al mismo tiempo está la felicidad y las ganas que venía juntando hace mucho tiempo. Espero que esas ganas se puedan ver reflejadas en el primer partido que me toca jugar como titular con la camiseta de Los Pumas”, finalizó.
RNS jc/jg
Los primeros minutos fueron de trámite parejo. Tanto Francia como Los Pumas, mostraron sus armas desde el inicio, solo que la diferencia estuvo en la amonestación por tackle...
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