Los jugadores novatos de los All Blacks, asesorados por Ian Foster, integrante del staff técnico de los campeones del mundo el cual comanda, tuvo elogios de Steve Hansen, ya que él cree que estos nombres están en la cima de su juego, después de la paliza a Irlanda en uno de los cuartos de final de la Copa del Mundo.
Los irlandeses, el equipo número 1 del mundo a principios de año y respaldados por un apoyo ruidoso y exuberante, no tuvo respuesta, por eso el golpe de nocaut en el Tokyo Stadium.
Con este resultado, Nueva Zelanda, progresa en la Copa del Mundo, en donde disputará una vez una semifinal mundialista contra Inglaterra en Yokohama el sábado.
También es justo aclarar que hay un montón de cosas buenas para reflexionar.
“Hemos tenido una muy buena semana y los muchachos han tenido un salto de calidad en su producción”, dijo Foster.
“No fue una semana pesada y esperaban con ganas este partido. Tuvimos que jugar bien contra Irlanda, ya que si no lo haces, es realmente difícil quedarse con una victoria de esta naturaleza”.
“Ganamos la batalla de los forwards y ahí fue donde se ganó el partido en general”.
Hansen, que comenzó la conferencia de prensa post victoria dando crédito al capitán irlandés Rory Best y al entrenador Joe Schmidt, agregó que los All Blacks obtuvieron una ventaja con su defensa: “Cuando lo haces, los equipos pueden adivinarse a sí mismos y psicológicamente puedes obtener una ventaja”.
Hansen también tuvo elogios para quienes forman parte de su staff, particularmente para Foster, a quien dijo que estaba entrenando tan bien como siempre, y al capitán Kieran Read, quien había recibido algunas “críticas” en su país por la forma en la que había regresado a los All Blacks tras una lesión en la espalda, pero que estaba ahora jugando mejor que nunca.
Read, con una bolsa de hielo en la rodilla derecha, dijo: “Nuestra primera mitad probablemente fue de lo mejor. Pusimos mucha presión. Son un equipo fuerte orientado hacia adelante que también puede atacar… pudimos anotar algunos tries que nos dieron la oportunidad de irnos al descanso con una ventaja importante”.
Hansen agregó: “Ya estamos pensando en la preparación del partido con Inglaterra, pero para eso, tendremos que esperar hasta el próximo lunes. Inglaterra estará al acecho en lo que probablemente sea un encuentro épico y otro choque de estilos diferentes. Nuestros jóvenes jugadores como George Bridge, Sevu Reece, Jordie Barrett y Richie Mo’unga volverán a tener nuestro respaldo”.
“Tengo muchas ganas de jugar también ahora que nos hemos ganado el derecho de disputar una semifinal”, dijo Hansen. “Será un gran desafío, pero no creo que esta noche sea la noche para hablar de eso”.
“Hay que tomarse el tiempo de disfrutar y relajarse. Haremos eso y disfrutaremos de nuestro momento. Fue un partido especial el de Irlanda, uno del que todos los All Blacks y neozelandeses pueden estar orgullosos”.
“No pensaremos en Inglaterra hasta mañana”.
“Me gustaría reconocer públicamente a Rory Best y Joe Schmidt”, dijo Hansen, quien habló largamente con su rival en el medio de la cancha antes de la patada inicial.
“Ambos tuvieron carreras magníficas en sus respectivos roles para Irlanda. Han sido fundamentales para transformar a Irlanda en el equipo número 1 del mundo a principios de año. Felicitaciones para ellos. Sé que están terminando ahora. Esta no es la forma en que les hubiera gustado haber terminado. Lamentablemente, el deporte no es justo”.
Sobre la reacción del público irlandés cuando sus dirigidos realizaban el haka, agregó: “No les importa viajar para una fiesta”, dijo Hansen. El canto ahogó el haka pero no hubo resentimientos. Fue algo así como un partido en Dublín para ellos. Los kiwis son más tranquilos”.
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