El ex entrenador de los Wallabies, Michael Cheika, admitió que dejó el trabajo lamentando no haber podido guiar al seleccionado nacional en la disputa de Bledisloe Cup y el Mundial.
A pesar de ganar el Rugby Championship y guiar a los Wallabies hasta la final del mundial en 2015, a partir de ahí, fue una lucha de coherencia en los cuatro años siguientes.
En 2016, Australia quedó en cero en la serie de tres test match ante Inglaterra en la serie de junio, mientras que dos años más tarde obtuvieron solo cuatro victorias en 13 partidos.
Su recorrido al frente del 15 Aussie, culminó con una pobre campaña en el Mundial disputado en Japón, tras la derrota en cuartos de final por 40-16 frente al equipo dirigido por Eddie Jones.
“¿Estoy satisfecho al final? No, porque quería ganar una Bledisloe Cup y la Copa del Mundo”, dijo Cheika a la Fox League .
“No pude hacer eso y eso me duele, personalmente, porque realmente valoro a los fans en la calle y sé que eso es lo que quieren”.
“Cuando estás entrenando a tu equipo nacional, es muy diferente a un club número uno, no eres un reclutador de jugadores, eres un selector”.
“Así que lo siguiente que sientes realmente, el día después del partido, es tristeza, incluso las personas que no son personas de rugby, porque estás representando a Australia, saben y sienten cómo jugaste el día anterior”.
“Tienes una gran victoria, todos están entusiasmados y te felicitan. Luego en el próximo partido: lo veo en mi propia familia; ya sabes, los niños, todos están vestidos con sus camisetas y a la mañana siguiente, si perdemos, ese entusiasmo y felicidad se va rápidamente”.
“Así que lo siento en mi propia familia”.
A pesar de un par de años finales insatisfactorios como head coach y figura del rugby australiano, Cheika todavía encuentra recuerdos del trabajo y su tiempo a cargo de los Wallabies.
“Honrado y agradecido”, dijo sentirse. “Para un niño como yo, pensar que tendría la oportunidad de entrenar a los Wallabies, nunca lo hubiera imaginado. Siempre he sido un extraño en el rugby. Entonces, para tener esa oportunidad y para considerar las circunstancias que hemos tenido en el rugby australiano en los últimos cinco años, siempre hemos representado al país con el máximo valor”.
“A veces no estábamos en nuestro mejor momento, a veces teníamos 40 minutos para el olvido y teníamos que hacer remontadas como así también hemos tenido importantes victorias. Incluso en 2019, tuvimos una gran victoria sobre Nueva Zelanda en Perth ”.
Cheika también sabe que es consciente que durante parte de su proceso, hubo algunas distracciones en el rugby australiano como así también varios problemas en el Super Rugby, por eso Cheika sabe internamente todo lo sucedido puertas adentro.
Y agregó: “Al final del día, los Wallabies son el resultado de nuestros preparativos en el Super Rugby y han sido difíciles porque hemos tenido muchas cosas en juego”.
“Con la eliminación de Western Force en 2017 y la ida de muchos jugadores al rugby extranjero, todo se fue deformando. Pero luego, cuando los jugadores se juntaron y pulieron problemas y detalles, creo que realmente jugaron con la cabeza puesta en Australia”.
“Soy sincero en saber que eso no es perfecto, pero (siempre) estoy orgulloso de ser parte de eso, de algunas de las grandes victorias y también de estar allí después de algunas duras y difíciles derrotas…”.
“En el coaching en este momento, debes ser un profesional para convertir lo negativo en positivo y eso fue algo que realmente me encantó hacer porque lo pude conseguir con muchos jugadores los cuales respondieron mucho”.