Tras cinco fechas disputadas del Super Rugby Aotearoa, algunas figuras de las franquicias de Nueva Zelanda se manifestaron y aseguraron que la competencia es insostenible.
Es prácticamente imposible imaginarse que el Super Rugby disputado originalmente entre equipos de Nueva Zelanda, Australia, Sudáfrica y Jaguares de Argentina vuelva a llevarse a cabo. Lo que se puede prever es que a partir de 2021 los equipos neozelandeses podrían organizar una competencia con Australia y algún equipo del Pacífico.
Aunque también se está forjando la idea de que Nueva Zelanda siga su propio camino y continúe organizando su propio torneo independientemente de los demás. A partir de esta idea, Brad Weber y Bryn Hall, jugadores de Chiefs y Crusaders respectivamente opinaron al respecto.
“Creo que la belleza de Super Rugby es que tenemos todos estos equipos diferentes de todo el mundo. De hecho, realmente disfruto esa parte”, aseguró Weber. Además agregó: “Ir a África por dos semanas, especialmente siendo un chico joven, es una gran experiencia de aprendizaje, es una forma de conectarse con los compañeros”.
Por último sentenció: “Jugar partidos entre equipos de Nueva Zelanda todo el tiempo probablemente no sea sostenible en torno al bienestar de los jugadores, la exigencia es muy grande”.
Bryn Hall coincidió con Weber en que el Super Rugby Aotearoa no es el camino a seguir, pero admitió que no está seguro de cómo debería estructurarse una competencia nueva.
“Creo que, como consumidor, si eres neozelandés, te encanta verlo. El Super Rugby Aotearoa llena estadios todo los fines de semana y aporta rugby de calidad. Pero es difícil, y no creo que sea sostenible el hecho de competir solo con equipos de Nueva Zelanda”, sentenció Hall.
Para finalizar, el medio scrum de Crusaders dijo: “Creo que sea cual sea la decisión que se avance, solo tiene que ser una competencia que sea competitiva, todos los equipos que estén disponibles”.