Tras la conclusión de la Copa Mundial de Rugby 2021, nos reunimos con Olivier Reggiani, cuyo proyecto reunió a escolares de todo el mundo para apoyar el torneo.
En la víspera de la final de bronce de la Copa Mundial de Rugby 2021 , los jugadores de Francia recibieron un mensaje motivador desde casa.
Los alumnos de Ecole Maurice Boyau, una escuela rural en el sur de Francia, prepararon un poema y produjeron un video para desear a la escuadra lo mejor antes del partido contra Canadá.
Fue la culminación de un proyecto de dos años, ‘Try and Stop Us for Children’ , que fue una creación del maestro y director Olivier Reggiani.
En el período previo al torneo retrasado, los alumnos intercambiaron 360 cartas con miembros del equipo francés, a quienes los niños les entregaron muñequeras antes de viajar a Nueva Zelanda.
Reggiani se había propuesto promover la igualdad de género y los valores de la perseverancia y la motivación, y gracias a la ayuda de World Rugby y Rugby au Coeur, la organización benéfica oficial de la RWC 2023 , el proyecto se expandió para incluir a 322 alumnos de escuelas en las 12 naciones competidoras.
“Estoy muy orgulloso de ver la dimensión que ha tomado este proyecto”, dijo Reggiani a World Rugby. “Ver que este proyecto ha permitido que niños del otro lado del mundo conozcan a jugadores de la selección nacional, haber logrado reunir a tantos estudiantes en torno a esta gran competencia.
“Estoy muy orgulloso del interés de World Rugby y su apoyo, muy orgulloso de que nuestro proyecto esté entre los tres proyectos seleccionados, de los 300 financiados por Rugby au Coeur, para ser presentados en su próxima Gala Benéfica.
“Estoy orgulloso de ver a mis alumnos descubrir el mundo a través del rugby. Nada de esto hubiera sido posible sin la respuesta positiva de Katie Sadleir [ex Gerente General de Rugby Femenino de World Rugby] desde el principio”.
Aprendiendo otra perspectiva
Como parte del proyecto, alumnos de Francia, Sudáfrica y otras naciones pudieron conocer a miembros de los equipos de la RWC 2021 antes de partir hacia Nueva Zelanda.
Esto proporcionó a los participantes una motivación extra para apoyar a sus selecciones nacionales durante el torneo, madrugando para ver los partidos.
Reggiani no cree que este vínculo fuera unidireccional, y sugiere que “los jugadores jugaban pensando en los niños y que los niños tomaban a los jugadores como ejemplo para trabajar mejor en clase”.
La creación de una conexión con otras 11 escuelas de todo el mundo también permitió a los niños de cada una aprender sobre la cultura, la historia y la vida cotidiana de sus contemporáneos en esos diferentes países.
“Este aspecto del proyecto permitió a los alumnos tener información de cada una de las naciones y poder seguir los partidos de la Copa del Mundo con otra perspectiva”, agregó Reggiani.
“Los otros equipos ya no eran anónimos, conocían la bandera, el himno y podían asociar este equipo con una escuela. Entonces, gracias a este proyecto, los estudiantes fueron actores y se apropiaron de esta competencia”.
Mirando hacia el futuro
Reggiani confía en que los lazos forjados durante el proyecto ‘Try and Stop Us for Children’, tanto con los jugadores como con los compañeros, perduren ahora que ha concluido la RWC 2021.
Está considerando ejecutar un proyecto similar para la Copa Mundial de Rugby 2023, que se jugará en Francia en septiembre y octubre próximos.
“Los alumnos les escriben a los jugadores desde hace más de dos años, junto con la escuela. Ahora, cada estudiante puede continuar este intercambio.
“Estoy seguro de que algunos continuarán y conocerán al jugador con el que intercambiaron cartas”, dijo Reggiani.
“Con algunos de los profesores el trabajo ha sido excelente, y he conocido personalidades muy diferentes, pero todas apasionadas.
“Apasionado del rugby pero especialmente de la noción de transmisión del descubrimiento. Creo que seguiremos trabajando juntos”.
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Créditos: World.Rugby