Union Bordeaux-Bègles vivió un fin de semana histórico en Cardiff al consagrarse campeón de la Champions Cup tras vencer a Northampton por 28 a 20. La emoción del primer título europeo del club desató celebraciones inolvidables, y algunas… bastante inusuales.
Uno de los protagonistas de la conquista, el pilar Ugo Boniface, fue más allá de los festejos tradicionales: decidió tatuarse el trofeo en su muslo derecho como recuerdo imborrable del logro.
Fiesta, tatuaje y emoción Nacido en Lot-et-Garonne, Boniface, que pasó por Casteljaloux, Nérac, SU Agen y Aviron Bayonnais antes de llegar a Bordeaux, no quiso dejar pasar la oportunidad de inmortalizar el momento. Tras levantar la copa en el Principality Stadium y celebrar con sus compañeros en Burdeos ante más de 40.000 personas, pasó por el tatuador para grabar en su piel el símbolo de la Champions Cup.
En diálogo con France Bleu Pays Basque, Boniface reveló:
“Fue una locura. Nunca vi tanta gente en las calles de Burdeos, salvo tal vez cuando la selección francesa ganó el Mundial. Solo somos un grupo de amigos que consiguió este título por la ciudad, el presidente y los que dejaron todo por este club”.
Del éxtasis a la concentración Pero la celebración tuvo su final. El pilar confesó que debió dejar la fiesta antes de lo previsto para enfocarse en el próximo compromiso del Top 14:
“Simplemente me fui a casa porque tenemos partido este fin de semana. La fiesta es más dura en Pro D2 que en la Champions Cup”.
Boniface ingresó a los 58 minutos de la final, con su equipo apenas 8 puntos arriba. “Fue pura concentración”, dijo. Y es que el Principality Stadium, a su juicio, “es uno de los estadios más bonitos del mundo”.