El ex hooker de los Wallabies y el ex medio scrum de los All Blacks calificaron como “injusta” y “excesiva” la decisión del árbitro francés Pierre Brousset, quien expulsó al segunda línea irlandés por su contacto con Beauden Barrett durante el partido disputado en Chicago.
El encuentro entre Irlanda y Nueva Zelanda, disputado el pasado sábado en el Soldier Field de Chicago, dejó no solo la victoria de los All Blacks por 26-13, sino también una gran polémica en torno a la tarjeta roja mostrada a Tadhg Beirne en los primeros minutos del partido.
El segunda línea irlandés fue inicialmente sancionado con tarjeta amarilla por el árbitro francés Pierre Brousset, luego de un choque de cabezas con Beauden Barrett. Sin embargo, la decisión fue elevada a roja tras la intervención del oficial de revisión de juego sucio, quien consideró que el contacto representaba un “alto peligro”.
La sanción generó fuertes críticas en el mundo del rugby, entre ellas las de dos figuras de peso: Jeremy Paul, ex hooker de los Wallabies, y Justin Marshall, histórico medio scrum de los All Blacks.
En el podcast The Good, The Bad & The Rugby AUNZ, Paul fue contundente: “Fue una vergüenza. Creo que hubo atenuantes porque fue un pase adelantado, y Barrett estaba muy cerca de la marca. Sorprendió a Beirne más que nada; no creo que pudiera haber reaccionado de otra manera. Para mí, era amarilla y penal, pero roja fue increíblemente severa.”
Por su parte, Marshall, quien comentó el partido para la televisión, coincidió con el australiano y apuntó a la inconsistencia en la aplicación del reglamento: “Es frustrante la falta de coherencia. Hablan de mitigación y de eliminar el contacto a la cabeza, pero en este caso la mitigación influía: Barrett ni siquiera necesitó evaluación por conmoción. El contacto fue mínimo.”
El ex número 9 de los All Blacks añadió que la decisión del árbitro “careció de sensibilidad” respecto al contexto de la jugada: “Beirne no estaba bajando su altura corporal. Sí, amarilla según el reglamento, de acuerdo. Pero cuando la elevan a roja, pensé: ‘¿En serio?’. No podía creer lo que oía. ¿Por qué no ven lo que todos los demás están viendo?”
La expulsión de Beirne condicionó los primeros minutos del partido, aunque Irlanda logró mantenerse en juego hasta el tramo final, cuando los neozelandeses impusieron su ritmo y potencia para quedarse con una nueva victoria en esta Serie de Naciones de Otoño.








