Volvió a hablar luego del conflicto con los dirigentes de la UAR y aseguró: “Por esa carta de renuncia no pude dormir durante un mes”.
Volvió a hablar luego del conflicto con los dirigentes de la UAR y aseguró: “Por esa carta de renuncia no pude dormir durante un mes”. Todavía no sabe qué va a hacer después del retiro, pero el Mundial de Francia es su próximo objetivo.
Agustín Pichot volvió a la escena después de la serie de test matches y la clasificación al Mundial de Francia 2007, y se refirió nuevamente al conflicto con los dirigentes de la UAR. El medio scrum del Stade Francés habló en exclusiva con la Revista Viva, y aseguró: “Estuve muchos meses sin dormir por esa carta de renuncia, porque cuando vos generás el conflicto perjudicás a muchas personas, pero el más perjudicado es uno, el que toma la decisión del conflicto”.
Todo parecía solucionado entre los dirigentes y Los Pumas, pero la semana pasada se retrocedieron varios pasos. “No pasa por un tema económico. La mayoría está jugando en Europa, la gran discusión fue para los jugadores que están en la Argentina y les cuesta jugar. Por ejemplo, si viajás seis semanas al año, ¿qué trabajo te va a dar ese tiempo?
Fue uno de los impulsores de la carta de renuncia a los partidos de la ventana de junio de la IRB, pero no se siente un “piquetero”. “Hay un momento en el que los ideales hay que ponerlos por encima de todo, y más si sos un referente. Jefe, piquetero, revolucionario son cosas que no hacen a mi imagen”, dijo el ex CASI. Tiene 31 años y juega al máximo nivel desde los 17.
El amateurismo le generó problemas desde siempre, porque su padre era un ferviente defensor de ese estilo de juego. Pero ahora Agustín quiere el pase al profesionalismo, para “poder ser el mejor”. “Mi viejo era ultraamateur. Que su hijo se haya ido a jugar profesional fue súper duro para él. Si querés ser el mejor, tenés que ser profesional, y yo quise ser el mejor. Yo quiero ser el mejor, nunca tuve dudas y no voy a parar”, confesó uno de los máximos referentes del rugby argentino de los últimos años.
Desde muy chico que juega a este deporte, y no piensa qué puede pasar en algunos años cuando ya no corra más con la ovalada. ” Es como que durante lo que dura el partido estás flotando. Me cuesta pensar en algo que en el futuro me pueda llegar a dar eso “, cerró Pichot.
Fuente: Diario Olé.com.ar