Para Santi, el rugby es una pasión. Tras buscar bastante, halló el medio ideal para mantenerse y, así, no dejar el seven de Los Pumas.
El color chocolate es un color de invierno. Amarillo jilguero y rosa se usan mucho. El naranja combina bien con el verde". Stop. Quien habla con Olé no es Louis Vuitton, ni John Galliano ni mucho menos Givenchy, todos ellos famosos diseñadores mundiales. No. Es Santiago Gómez Cora, actual máximo tryman del Circuito Internacional de Seven. Fullback de Lomas en el torneo de la URBA, estudiante de Administración de Empresas en la UCES, gran figura de Los Pumas en el seven, al menor de los Gómez Cora (28 años) no le sobra tiempo para un trabajo fijo. "Como no tengo una empresa familiar y viajo seguido, me costó encontrar un laburo. En un momento, hasta le comenté a mi socio que pensaba dejar el rugby porque necesitaba plata para vivir. Claro que eso no me gustaba", contó. Santiago está en la casa de su socio/amigo Matías Ruiz, ex rugbier. "La usamos de oficina porque está a tres cuadras de la mía", comenta, mientras muestra modelos, la computadora por la que reciben los pedidos y hasta un… ¡monopatín a motor! con el que él hace el delivery.
¿Cómo surge la idea de hacer y vender remeras?
Siempre me gustaron las remeras. De los viajes, le traía alguna a Matías. De tanto pensar, salió esto y en marzo del 2006 arrancamos con el proyecto.
¿Quién los asesoró?
Nadie. Nos mandamos solos. Fuimos a Once a averiguar precios de telas, buscamos talleres. Ojo, teníamos cero experiencia.
Contá cómo es el procedimiento previo a la venta de una remera.
Primero aprovecho mis viajes para ir a Londres, al Soho, a Hong Kong para ver lo que se usa y cómo. Cuando vuelvo, vamos a ver las telas y las posibles combinaciones. Durante dos semanas nos toca ir al taller todos los días para manejar los cortes de las remeras, que no sean muy largas, que el cuello no sea muy ancho…
¿Y qué hacen cuándo ya están terminadas?
Las publicamos en nuestra página web (www.pegalavuelta.com) conmigo como modelo y regalamos algunas a amigos para que arranque el boca a boca.
¿Tenés más tries anotados en el seven o más remeras vendidas?
Je, está parejo. Hablando en serio ya vendimos casi el doble de remeras. Debemos andar por las 400.
¿Cuál es tu prioridad: el rugby o el negocio?
Jugar al rugby es una pasión. Y las remeras es un medio para seguir jugando en la Selección. Por eso digo que vendo remeras por la camiseta. Si estuviera sólo en mi club, no tendría problemas en conseguir trabajo de algo relacionado a lo mío, la Economía. También es cierto que se me hace difícil formar una familia porque estoy más afuera que en el país.
¿Tenés algún diseño que sea tu preferido?
Me gustan muchos. El del Coyote, el que tiene un joystick del viejo Nintendo, el que tiene los acordes de la guitarra, pero creo que mi preferido es el de Cinco de Mayo, que arriba tiene cinco potes de mayonesa.
Por Martín Seldes (Olé.com.ar)