AUCKLAND (Reuters) – Escocia espera estar a la altura de 140 años de rivalidad de rugby con Inglaterra y poder contar con el apoyo del público local cuando ambos equipos se enfrenten el sábado en la Copa Mundial de Nueva Zelanda.
La mejor oportunidad de los escoceses de alcanzar los cuartos de final es vencer al campeón mundial del 2003 por al menos ocho puntos en el estadio Eden Park y esperar que Argentina consiga cuatro tries en una victoria ante Georgia en el último partido del Grupo B el domingo.
Con su rendimiento lejos de un nivel que le permita lograr ese objetivo, Escocia está buscando cualquier apoyo adicional para el gran duelo, incluyendo el respaldo del gran número de neozelandeses con herencia escocesa que hay en el país sede.
“Me atrevo a decir que el fin de semana el apoyo escocés va a ser más ruidoso que el inglés”, dijo el miércoles a periodistas el entrenador de defensa de Escocia, Graham Steadman.
“Eso es enorme. Le da a cualquiera un empujón (…) vamos a tratar de energizar al público con nuestra actuación y si lo logramos, estaremos en la cresta de la ola y todo estará de nuestro lado”, agregó.
Steadman recordó lo sucedido en la derrota ante Argentina, que complicó las posibilidades de clasificación de Escocia.
“No escuché a los argentinos hasta los últimos dos minutos del partido del fin de semana pasado”, sostuvo.
Desafortunadamente para los escoceses, eso sucedió porque los Pumas anotaron un try sobre el final que les dio la victoria en Wellington y dejó a su rival en una situación precaria.
De todos modos, Escocia ha sorprendido a Inglaterra en el pasado y no pierde la esperanza.
“Hay un valor agregado que es que estamos desesperados por ganarles”, admitió el centro escocés Nick De Luca. “Hay mucha historia. Si lo hacemos bien, Inglaterra quedará afuera, que no es un incentivo pero sí una bonificación agregada”, continuó.
Por su parte, el medioscrum Chris Cusiter dijo que su motivación no pasaba por arruinar el torneo de su país vecino sino por el respeto por el nivel de su rival.
“Inglaterra es uno de los mejores equipos del mundo y han ganado el Mundial, así que va a ser un gran desafío”, manifestó Cusiter.
“Todos en el plantel están esperando esta oportunidad, especialmente en el Mundial y en la situación en la que estamos. No los odiamos, los respetamos”, agregó.
Los partidos entre Escocia e Inglaterra generalmente son muy equilibrados y el último terminó con victoria de los ingleses 22-16 en Londres, por el torneo Seis Naciones.
En Mundiales, ambos equipos se enfrentaron una sola vez, cuando Inglaterra superó 9-6 a Escocia en las semifinales del torneo de 1991.
