Hay veces en que la fortuna puede inclinar la balanza para uno u otro lado. Y más, en un partido de final impredecible. En el clásico del Sur, Pucará venció a Lomas por 20-18, con momentos en los que el azar se inclinó decididamente para el lado de los de Burzaco. Hay veces en que la fortuna puede inclinar la balanza para uno u otro lado. Y más, en un partido de final impredecible. En el clásico del Sur, Pucará venció a Lomas por 20-18, con momentos en los que el azar se inclinó decididamente para el lado de los de Burzaco.
En lo previo y en el desarrollo, el marco fue espectacular, con 4000 almas que le aportaron color a la fiesta, y vibraron al compás de los vaivenes de un partido disputado con todo fragor.
En el arranque, Lomas y Pucará fueron como dos boxeadores que midieron sus fuerzas e intentaron descifrar las virtudes y defectos de su oponente. Así, Lomas, con el mayor poderío físico de sus forwards, apostó al juego corto, seguro, pegado a las formaciones, y tuvo en el line una fuente segura de obtención.
Pucará, por el contrario, apostó por abrir el juego cuando sus backs intuían el resquicio para lastimar, y así llegó la primera conquista por intermedio de Diego Palma, a los 8 minutos de juego.
Lo cerrado del juego impedía ver un juego vistoso, con permanentes interrupciones que no les permitían a ninguno de los dos equipos despegarse en el marcador. La monotonía se quebró a los 42 minutos, cuando la polémica aterrizó en la cancha: con el marcador 8-6 a favor de Pucará, Matías Birba, de Lomas, ejecutó un penal, la pelota cobró demasiada altura, y dio toda la impresión de que ingresó. El árbitro Leonardo Borghi miró a sus jueces de línea, Nicolás Coulin y Enrique Bentham, que ante la duda, optaron por dejar bajas sus banderas, ante la protesta de los jugadores locales.
Así fue como, herido en su orgullo por ese error, Lomas encendió los motores y en una ráfaga de tres minutos anotó dos tries por intermedio de Juan Baraboglia, primero, y Walter Weiss, después.
Luego de ese momento de furia, Lomas tuvo su minuto fatal a los 20 del segundo tiempo. Con ventaja de 18-13, le faltó inteligencia, y optó por jugar al line un penal; cuando la pelota estuvo nuevamente en juego, Baraboglia intentó un drop que fue interceptado por Germán Villamil, con tanta fortuna -la pelota le pegó en una costilla-, que le quedó servida para correr rumbo al try, a pesar del cierre de Gómez Cora.
En el final, el aliento se contuvo con un penal accesible del apertura local, Matías Birba, que se escapó por centímetros. Pucará gritó su desahogo, y Lomas se fue incrédulo, envuelto casi en una pesadilla.
"Corrí 70 metros sin mirar a nadie"
La sonrisa de Germán Villamil -jugó todo el partido de intermedia e ingresó a los 15 minutos del segundo tiempo por Palma- lo decía todo, en la tarde en la que se vistió de héroe para otorgarle con una espectacular corrida la victoria a Pucará. "Cuando Baraboglia se perfiló para patear el drop, por instinto atiné a levantar los brazos y la pelota me pegó en las costillas, con tanta fortuna que me quedó servida. Luego, corrí como setenta metros sin mirar a nadie, aunque me parecieron cien", dijo con picardía el hombre de la camiseta N° 7.
Por Carlos Travaglini
De la Redacción de LA NACION
TODA LA FECHA – TOP 14
Newman 37 – 0 San Cirano
Hindú Club 29 – 17 Champagnat
CUBA 17 – 54 SIC
Lomas Ath. 18 – 20 Pucará
San Luis 13 – 27 Belgrano Ath
CASI 27 – 14 Regatas BV
La Plata 12 – 20 Alumni
Las posiciones
Hindú 10
Newman 10
CASI 9
SIC 9
Pucará 8
Belgrano At. 6
Alumni 5
Regatas 4
Champagnat 4
Lomas 2
San Luis 1
CUBA 1
San Cirano 0
La Plata 0
Tercera fecha (sábado 26 de julio)
Regatas vs. San Luis
Belgrano At. vs. Lomas
Pucará vs. CUBA
SIC vs. Hindú
Champagnat vs. Newman
San Cirano vs. La Plata
Alumni vs. CASI