El SIC nunca se rindió: pese a ser controlado por la entrega de Duendes, pasó a las semifinales con un try de Soiza a dos minutos del cierre
En medio de la agonía no se dejó doblegar por la adversidad. Recurrió a su corazón para encontrar alivio, y en el peor momento exhibió lucidez para encontrar una solución a su compleja situación.
Estuvo cerca Juliá, después casi apoya Meyrelles y en un tercer acercamiento fue Madero el que no pudo marcar. Duendes resistió con estoicismo, pero la avalancha furiosa del SIC sobre el epílogo resultó ingobernable para del batallador conjunto rosarino: de atropellada, Soiza rompió tackles y decretó el triunfo agónico de los sanisidrenses (30-27) que, después de dos temporadas regresan al cuadro de los cuatro mejores del país.
"Hay que jugar los partidos hasta el final, y este equipo tuvo ese mérito", remarcó Serra, y las palabras del capitán describen con exactitud las razones por las cuales los Zanjeros prevalecieron ante un adversario que rindió en buena forma, y el único reproche que se le puede hacer es la vulnerabilidad que tuvo en el instante de suprema exigencia. El equipo verdinegro dispuso de sus momentos de dominio, en el comienzo de ambos tiempos, pero no logró conservar la diferencia numérica nunca. En el capítulo inicial, con un par de aproximaciones, Miralles marcó distancia (6-0), y luego del intervalo, se recompuso del parcial negativo (13-20) con un cuarto de hora de notable efectividad. En un kick alto y cruzado, Miralles desairó a Serra, y el fullback rosarino voló hasta debajo de los palos; y después de una acción individual de N° 15, Fulco remató para alejar a los visitantes.
En ese lapso, Duendes se movió con seguridad (pasó a ganar 27-20). A partir de su presión, frustró al SIC, aunque esa dificultad no debilitó la tozudez de los locales que, en el pasaje de mayor apremio, más íntegros se mostraron. La búsqueda de la formación sanisidrense se intensificó, y aunque lo hizo con un alto porcentaje de desesperación, demostró capacidad aún en los instantes en que vaciló. Entonces, sigue encaminado en los dos frentes: el Nacional y el Top 14 de la URBA.
La recta final por el título
Las semifinales serán el 15 de noviembre: La Plata recibirá a Cardenales (T), mientras que el SIC y Jockey (Rosario) revivirán el choque de 1994, cuando ganaron los Zanjeros (23-17). La localía de este cotejo se resolverá por sorteo. La final es el 22 de noviembre.
6 veces (incluida la de este año) llegó el SIC a las semifinales del Nacional; siempre que ganó en dicha instancia fue campeón: 1993, 1994 y 2006. Las dos caídas fueron ante Hindú: en 1996 (23-27) y en 2001 (23-43).
Fuente: Diario La Nación