Eduardo Fernández Gill, ténico del seleccionado nacional en la categoría menores de 20 años, una vez finalizado el Campeonato Sudamericano, habló con CORDOBAXV en donde analizó todo lo sucedio tanto en lo deportivo como en lo humano de esta nueva versión de los Pumitas.
Eduardo Fernández Gill, ténico del seleccionado nacional en la categoría menores de 20 años, una vez finalizado el Campeonato Sudamericano, habló con CORDOBAXV en donde analizó todo lo sucedio tanto en lo deportivo como en lo humano de esta nueva versión de los Pumitas.
– ¿Cómo viste a Los Pumitas en este Sudamericano y como evaluas el tiempo de trabajo que tuvieron?
La verdad que fue una semana súper positiva. Para nosotros este sudamericano nos ha servido para conocer a los jugadores, y creo que hemos tenido una siere de días juntos donde pude rescatar cosas muy buenas con respecto a lo que veníamos a buscar que era la unión del grupo, analizar su comportamiento en los entrenamientos dentro de la cancha, etc. En el juego tuvimos un buen partido con chile, otro bueno con paraguay pero frente a Uruguay el equipo estaba realmente cansado porque hemos trabajado mucho más en los entrenamientos que en los partidos y era normal que es nos pase. Nosotros le habíamos avisado que podía al grupo que esto podía suceder. Uruguay venía herido de haber perdido con chile por primera vez y nosotros con la cabeza de estos chicos que sostengo que se están desplumando en el alto nivel, era algo lógico que cayera un poco el nivel. Considero que hay un plantel riquísimo y eso lo digo con el simple justificativo que vengo trabajando desde hace cinco años con diferentes camadas y estoy convencido que hay muy buenos jugadores y con buenos tamaños sobre todo en el pack de fowards ya que para esta edad es anormal. Es por eso que esto nos deja muy tranquilo y a partir de ahora hay que empezar a trabajar duro.
– ¿Este es el equipo qué va ir al mundial? ¿Es la base? ¿Habrá nuevas convocatorias?
– La base del mundial son cincuenta jugadores. Acá nosotros trajimos algunos jugadores para ver porque tuvimos poco tiempo para armar el equipo y ahora estamos viendo a estos jugadores. En realidad tenemos una ficha de 50 o 55 jugadores que seguijmos durante el Campeonato Argentino, con el sistema de software que tenemos para estudiar a cada uno de los chicos y así poder fortalecer sus virtudes y modificar las falencias. Para jugar en Córdoba el Sudamericano solo tuvimo que elegir a 26 nombres porque ese era el número que debíamos presentar, pero seguro que habrá muchos chicos que van a estar en la próxima concentración y que no estuvieron en este torneo.
– Con tu experiencia ¿Qué significa enfrentar a las potencias en todos sus aspectos?
– Esto es muy simple, a mi cuando me ofrecieron volver a entrenar de nuevo este equipo con Diego para el mundial de Tokio el año que viene, dijimos que si Argentina no tenía una preparación como la que vamos a tener ahora de ocho meses, yo prácticamente no iba. Porque realmente es peligro como fuimos este año a Gales en donde llevamos un equipo con una preparación de solo un mes y medio; es peligroso en la parte física pero es peligro en serio. Creo que a partir de ahora debemos poner en marcha el sistema de 45 ó 50 jugadores que estén trabajando a través de los centros de alto rendimiento ya sea tanto en la parte física, en la parte nutrición, absolutamente en todo, para que después podamos agregarle la parte técnica que es un trabajo aparte. Acá lo que más me preocupa es la parte física. Creo que vamos a llegar bien en ese aspecto siempre y cuando los chicos se entrenen duro. Por suerte contamos con algunos jugadores de muy buen tamaño casi te diría anormal para la edad en el pack de fowards. Este pack es uno de los más grandes que hemos tenido en los últimos seis o siete años.
– ¿Sos conciente de que hay que trabajar la parte física porqué podes poner en un problema a los chicos?
– Es peligroso, directamente peligroso.. Hoy no es como hace cuatro o cinco años. Yo he visto y participado en cuatro torneos como entrenador y otros tres como padre y cada año hay una diferencia abismal. Si acá no hay una preparación física en serio, yo fui claro en la Unión Argentina de Rugby, y dije directamente que no iba como entrenador porque es ir a sufrir porque es peligroso para los mismos jugadores.
– Técnicamente ¿Cómo ves a los chicos? ¿Tienen conceptos claros o hay que pulir un poco mas pensando en Japón?
– Por lo que pudimos trabajar en solamente una semana en Córdoba, no pudimos ver mucho porque me parece que fue poco tiempo. Hemos tratado de ver mucho a los jugadores en sus destrezas, en su relación con la pelota y el juego, hemos tenido poco tiempo en trabajar en el ensamble del equipo pensando que tuvimos una sola semana con partidos cada tres días. Hicimos más hincapié en cosas simples que buscarle cosas complejas al equipo. Si vos viste los tres partidos no hubo mucho movimiento de continuidad de juego , de células, de ataque. Eso se verá muchísimo mas adelante y te repito hicimos hincapié en otras muchas más cosas y aprovechando muchísimo los entrenamientos.
– ¿Qué jugador te gusto? ¿Quién dio más de lo que vos esperabas?
– No, creo que es muy parejo, sería injusto hablar en algún jugador en especial. Lo único que digo que es una camada que a esta edad tienen un tamaño fuera de lo común en lo físico y que tenemos un pack de fowards donde cinco de ellos están arriba del metro noventa y tres. También tenemos primeras líneas de 120 kg; Hacía mucho tiempo que no veía jugadores de este porte y mira entrené las camadas de Patricio Ablacete, Juan Manuel Leguizamos, Juan Gómez, Marcos Ayerza.
Por Martín Quetglas