El entrenador de Samoa, Stephen Betham, eligió una inusual forma de entrenamiento y dispersión. La explicación, supo ser jugador en el mundo de la pelota naranja.
Stephen Betham dejará un legado inusual y particular cuando termine su contrato después de la Rugby World Cup 2015.
El entrenador de Samoa, que fue jugador internacional de básquet, decidió realizar una serie de ejercicios relacionados con la pelota naranja para que el equipo se relaje. “Quizás no esté tan ágil como lo solía ser”, bromeó el centro George Pisi.
La carrera de Betham en el básquet tuvo su pico máximo cuando fue convocado por su selección en 1991 para los Pacific Games, pero no los jugó porque se mudó de Samoa a Nueva Zelanda. “Lo jugué en la escuela y creo que lo hacía bien. Jugaba para divertirme y ese es el nivel que tengo”, contó el entrenador de los Isleños.
El rugby en su camino
“Lamentablemente cuando fui convocado a los Pacific Games me estaba mudando a Nueva Zelanda y tenía que rendir exámenes en la nueva escuela. Ahí apareció el rugby en mi vida y es todo para mí”, relató Betham.
Mientras el básquet había quedado en un segundo plano, el rugby empezó a ser un éxito para el samoano. Particularmente cuando ganó el 2010 IRB World Series de Seven en su rol de entrenador de Samoa.
“Estuve entrenando durante nueve años dedicando mi tiempo al Seven, no pude ver crecer a mis chicos y ahora ya van a la universidad. Después de tanta presión, creo que es tiempo para estar en familia”, confesó el coach de Samoa que termina su contrato después de la RWC.
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