El entrenador de Nueva Zelanda, Steve Hansen, ha descartado trabajar con Inglaterra o cualquier otra nación después de dirigir a los All Blacks a su histórico título conseguido recientemente en Inglaterra 2015. Hansen no tiene planes de continuar en su puesto de trabajo pasado el 2017, pero no está interesado en ayudar a Inglaterra o cualquier otro equipo rival.
El técnico de 56 años, cuyo equipo se ha convertido en el primero en ganar dos títulos del mundo consecutivos, ha entrenado a Gales, pero resistirá ninguna oferta para entrenar a nivel internacional en el extranjero de nuevo.
“Ahora he entrenado a los All Blacks, no pude entrenar en contra de ellos”, dijo. “Este es el mejor equipo para mí porque soy un neozelandés y no tengo que ir a otro lugar.” Hansen tiene la vista puesta en ganar una serie de test match frente a los Lions cuando visiten Nueva Zelanda en 2017.
“En los próximos dos años queremos que sea un mejor equipo de lo que es ahora. Eso es un gran reto como entrenar en otro lugar. “Tal como están las cosas, Hansen siente que es poco probable que dirija en 2019 a Nueva Zelanda.
“Probablemente diría que es más probable que no voy a estar en mi puesto después de 2017. Si no es el adecuado para el equipo, yo no quiero hacerlo. Me encantaría entrenar a los All Blacks hasta el día que me muera, que es el mejor trabajo del mundo en lo que a mí refiere como entrenador de rugby. Pero, ¿es adecuado para el equipo? Yo no lo creo. Me ofrecieron un contrato para ir hasta 2019 pero yo no lo tomé porque no creo que tenía razón.
Nueva Zelanda tienen la esperanza de que será capaz de hacer frente a la inminente pérdida de un puñado de jugadores de alto nivel. Richie McCaw tiene todavía que confirmar oficialmente su retiro, pero, después de 148 partidos internacionales, Hansen sabe que no está en sus planes la participación de su capitán para el próximo año. McCaw y sus compañeros celebraron su éxito 34-17 sobre Australia con una fiesta de toda la noche y el tercera línea admitió que el resultado fue muy satisfactorio.
“El alivio no es tan grande como 2011, pero la satisfacción fue la misma”, dijo McCaw. Una pequeña parte de mi está triste porque los chicos no me verán jugar para los All Blacks de nuevo. Pero, ¿qué mejor manera de terminar?
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