De la mano de Ghislaine Landry, las norteamericanas se impusieron sobre Inglaterra y consiguieron la cuarta etapa del HSBC World Rugby Women’s Sevens Series.
Culminó este domingo con pleno éxito y ante un buen marco de público en el Mikuni World Stadium de Kitakyushu, la cuarta etapa del HSBC World Rugby Women’s Sevens Series, cita que quedó en manos de Canadá.
Las canadienses superaron en la final a Inglaterra por 7-5 y se alzaron con el máximo logro de manera merecida.
“La verdad fue una final increíble. No bajamos los brazos nunca y nos llevamos el encuentro. Estamos realmente felices. Esto es fruto del trabajo de todo el equipo”, indicó la capitana, goleadora y referente de Canadá, Ghislaine Landry.
Más allá del título obtenido con justicia por las norteamericanas, la nota del fin de semana la dieron las Black Ferns, que durante el sábado igualaron con Rusia, cayeron ante Francia y cortaron su racha invicta que preveía ser histórica, de 37 partidos ganados en forma consecutiva.
Este domingo, Canadá e Inglaterra arribaron al encuentro decisivo tras vencer en semifinales a Estados Unidos (24-12) y Francia (19-17).
Por su parte, las estadounidenses culminaron terceras al batir en la disputa del bronce a Francia, 36-12.
Y, por el quinto puesto, las neozelandesas doblegaron a las Aussies, 34-26. Previamente, en los cuartos de final, las canadienses derrotaron 17-14 a Rusia; Estados Unidos doblegó a Nueva Zelanda por 26-19, Inglaterra le ganó a las campeonas olímpicas, Australia por 21-7 y Francia cantó victoria sobre Irlanda, 19-0.
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