El entrenador australiano, Michael Cheika, estaba furioso con la decisión del árbitro Jaco Peyper de no penalizar a Owen Farrell por una aparente entrada ilegal a Izack Rodda durante la derrota de 37-18 el sábado.
Rodda se estaba dirigiendo hacia la línea cuando el apertura de Inglaterra golpeó al segunda línea sin envolver sus brazos, deteniendo el bloqueo en su camino. Con Farrell como el defensor final, el consenso fue que se debería haber otorgado un try penal y una tarjeta amarilla, lo que habría dado a los Wallabies la ventaja antes de irse a los vestuarios.
“La justificación de que Rodda trató de enfrentarlo con su hombro es ridícula”, dijo un irritado Cheika. “Eso es lo que dijo el árbitro. Eso es lo que haces cuando llevas la pelota”.
“Fui a la reunión de árbitros que tuvimos aquí -Londres- la primera semana antes del partido con Gales , y se refirieron de nuevo al tackle Owen Farrell contra Sudáfrica.
“Los árbitros dejaron que Angus Gardner se cansara de decir que eso debería haber sido penal para todos los entrenadores. Y si eso es una penalización, esto es tres veces peor”.
“Tal vez necesitamos mudar Australia al hemisferio norte ”.
Mientras tanto, la otra cara de la moneda a Cheika, el técnico de Inglaterra, Eddie Jones, continuó su política de negarse a criticar a los árbitros luego de la polémica llamada.
A Inglaterra se le negó un try para ganarle a Nueva Zelanda hace dos semanas y Jones repitió lo que dijo después de ese encuentro.
“Simplemente acepto cualquier decisión que tome el TMO y esa es mi postura final”, dijo.
“Hemos tenido algunas buenas decisiones, hemos tenido algunas malas decisiones, simplemente las aceptamos”.
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