Quade Cooper, ex apertura de los Wallabies, admitió que su cuando apoyó su rodilla en la cabeza del capitán de los All Blacks, Richie McCaw, fue deliberada y habló de luchar para convertirse en el enemigo público número uno durante la Copa del Mundo 2011 en Nueva Zelanda.
En una fascinante entrevista en el podcast Ice Project con el amigo de la infancia y ex jugador de la liga de rugby Penrith Panthers, Isaac John, Cooper habló sobre los altibajos de su carrera, incluida la experiencia de ser el hombre más odiado de Nueva Zelanda, sus batallas con los entrenadores de Wallabies, Robbie Deans y Michael Cheika, y cómo fue congelado en los Queensland Reds.
Cooper fue aborrecido en Nueva Zelanda, el país donde creció, durante la Copa del Mundo en 2011 después de que pareció golpear a McCaw en la cabeza durante un partido de la Bledisloe Cup en Brisbane justo antes del torneo.
Fue citado pero venció el cargo, y a los neozelandeses no les gustó nada esta decisión. No solo abuchearon al creador de juegos de los Wallabies durante la totalidad de la Copa del Mundo de 2011, sino también durante años después.
Cooper negó repetidamente haberlo hecho a propósito, pero ocho años después, reveló que la rodilla fue deliberada y su error no fue admitirlo en ese momento. Cooper también dijo que se había disculpado con McCaw unos años más tarde.
“Sí (fue a propósito), pero son cosas que suceden en una cancha”, dijo Cooper en el podcast de Ice Project.
“Me han golpeado en la cabeza, me han golpeado con muchas rodillas en la cabeza, todo ese tipo de cosas. Pero fue a quien se lo hiciste, y ya era un niño Kiwi jugando para Australia”.
“Para empezar, ya me odiaban. Y luego golpee al capitán de los All Blacks, el intocable, en la cabeza. Eso fue aún peor”.
“De esa manera llegué a Nueva Zelanda en el Mundial de 2011, y la verdad que me costó porque no podía ir a ningún lado, no podía caminar”.
“La gente venía y me pedía fotos y cosas como estas, pero tan pronto como estuvieron en el colectivo, todos me gritaban, con carteles, que decían:”Espero que te rompas la pierna, espero que mueras en algún partido. Ese tipo de cosas”.
“Pasé de ser conocido a ser el más conocido y el más odiado. Fue loco. Lo miro ahora y creo que no estaba preparado para ello. Y luego estoy frente al público negándolo todo”.
“Si volviera a estar en ese momento, podría manejarlo de otra manera y solo diría:“sí, lo hice. ¿Y qué?. ¿Qué puede decir la gente? Porque la gente seguía golpeándome porque dije que nunca lo hice. La pregunta seguía y seguía”.
“Luego, unos años más tarde, vi a Richie en el aeropuerto y me acerqué a él y le dije: ‘Lo siento’. No es que no le importara o le importara, es solo cuando le pedí perdón, lo enfrenté”.
“Dije: ‘Realmente te admiraba cuando eras niño, eras mi ídolo, todos en Nueva Zelanda te aman y yo te amaba. Entonces, cuando jugué contra ti, fue solo emoción, pasión, todo ese tipo de cosas se hizo cargo. Estabas jugando sucio conmigo y te apoyé la rodilla con intención”.
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