Tras la pobre actuación frente a Inglaterra en el Padre Martearena, Los Pumas piensan en la revancha del próximo sábado a las 16.10 en el José Amalfitani en lo que será la segunda presentación en la ventana de Junio.
Un mar de dudas dejó el primer round frente a Inglaterra. Pero rápidamente habrá revancha tras la pálida y pobre actuación del último sábado en Salta: será dentro de tres días en Liniers, más precisamente en el estadio José Amalfitani deVélez, donde Los Pumas intentarán mostrar otra cara ante el equipo muleto de la Rosa.
Lo que pasó
En una tarde muy desafortunada, Los Pumas no pudieron imponerse en ninguna faceta de juego ante Inglaterra, que dominó a voluntad un partido que se le presentó más fácil de lo esperado.
Las formaciones fijas y móviles fueron un martirio para los argentinos, que o no las ganaron o cuando lo hicieron fue con pelotas de muy escasa calidad.
Los Pumas presentaron un juego previsible que fue muy bien defendido, que cuando consiguió avanzar a duras penas en el terreno, fue sólo producto de esfuerzos individuales. El juego asociado no existió. Y en defensa, dejó mucho que desear, fallando en la primera línea de tackle y con un reposicionamiento lento, le simplificó la tarea ofensiva a un rival que con tiempo, espacio y sin resistencia se floreó durante la primera media hora de partido.Y fue suficiente. El staff puma ya encendió previsibles luces de alarma: otra actuación como ésta sería muy preocupante.
Lo que puede pasar
Phelan decidió cambios en el plan-tel que jugará el próximo sábado ante Inglaterra en Vélez. Y un dato curioso, no menor, significativo y representativo de lo que fue lo ocurrido el sábado pasado en Salta, es que sacó de los convocados a la pareja de medios, a los conductores que jugaron como titulares en el Padre Martearena, reemplazándola por otra. No estarán ni Landajo ni Urdapilleta (tampoco será de la partidaVallejos). Fueron convocados Tomás Cubelli, Benjamín Madero y Rodrigo Báez.
¿Hará cambios profundos Phelan? Posiblemente. Lo cierto es que salvo este cambio en la pareja de medios, más la reconfortante y merecida presencia de Báez, el hecho de haber desafectado a los conductores es una señal de que no estuvo conforme con lo demostrado por dos jugadores que en la previa eran muy solventes en aspectos ofensivos, pero que a la luz de los acontecimientos no pudieron torcer el destino del partido contando con pelotas de baja calidad. En ese aspecto, tal vez un cambio en ese sector de la cancha (¿jugará Felipe como 10 y Ascárate de 12?) y con Cubelli oVergallo como número 9, posiblemente Los Pumas no intenten plasmar en Liniers el mismo planteo que en Salta. Tal vez se vea en Los Pumas una faceta más cerebral, más pensante y no tan vertiginosa sin visión ni resolución de lo que estaba planteado en el campo de juego el sábado, como final-mente pasó.
Por: Eugenio Astesiano
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