El seleccionado de Salta logró una histórica victoria al derrotar esta tarde a Rosario, en calidad de visitante por un claro 32-20 (5-0) por la primera fecha del Campeonato Argentino de Uniones, de esta manera se desquitaron de aquella derrota que los dejo afuera de una semifinal.
De esta manera rompieron el maleficio de tres derrotas consecutivas. La última, hace un año, en el mismo escenario cuando Rosario ganó sobre el final y condenó a los “mayutanos” a jugar por el descenso. Pero como el deporte siempre da revancha, ahora el que sonrió más fue Salta.
El inicio fue parejo. Los dos con intenciones de jugar. Con una dura lucha por la posesión, con un Rosario que tuvo mejor obtención en el line y hasta se dio el gusto de emparejar por momentos el fuerte scrum salteño. Pero sin poder sacar provecho de esa posesión, porque le costó muchísimo generar juego, producto de la presión rival, pero también como consecuencia de los errores, que casi fueron una constante de los rosarinos.
Talvez fue sorpresa, pero evidenció la actitud de los salteños, cuando con la primera pelota recuperada lanzaron desde su terreno un avance profundo por el abierto que terminó con el veloz Nuñez en el ingoal. La respuesta no tardó en llegar, porque enseguida, desde un scrum partió el movimiento por el centro de la cancha con Boffelli abriendo brechas, para la entrada de Schiavo, casi bajo los palos. Hasta allí, un ida y vuelta. Luego, aprovechando una pelota recuperada, con varios pases, Fradua estableció la diferencia y pareció que el camino comenzaba a verse más claro para el local.
Pero, de a poco, Salta comenzó a darle más responsabilidad a sus delanteros. Sobre ellos se fue descargando todo el peso de la lucha y por allí comenzó a marcar diferencias, porque empezó a encontrar los espacios por donde pasar. Rosario, buscando siempre darle más dinámica a su juego, manejando bien su tercera línea, no encontraba la forma de consolidarse en ataque y su dominio territorial prácticamente fue estéril, porque el orden y por ende la ausencia de errores de los salteños no daban chance de algun penal a los palos.
En el arranque del complemento se lo vio mucho más decidido a los salteños. Con más convicción, sabiendo que hacer con la pelota y presionando con fiereza cuando no la tenían. Rosario, solo chispazos, porque de a poco fue cediendo el protagonismo y terminó asumiendo casi un rol de espectador, dedicándose más a defender que atacar. Y cuando tuvo la oportunidad, su juego desplegado no tuvo la efectividad de otras tardes, mostrándose como desorientado, sin ideas.
Sin embargo, de un line robado en las cinco rivales Leo Senatore volvió a encender la luz de esperanza. Más de uno pensó que ahora empezaba a jugar Rosario, pero solo quedó en deseos, al final frustrados. Porque a medida que pasaban los minutos, la inoperancia y los errores fueron desdibujando al “Ñandú”, a la par que crecía Salta. El try de Giménez, con control, apoyo y continuidad, estableció el empate y allí empezó el final para los dueños de casa.
Salta evidentemente se dio cuenta que estaba para la gran conquista. En los minutos finales pisó a fondo el acelerador y fue a buscar el partido. Con muchísima actitud, con una entrega total, dejando el alma en cada pelota, se lo llevó por delante a Rosario que nada puso hacer ante la avalancha de Los Mayuatos, que no conformes con el triunfo fueron también a buscar el punto bonus, para dejarlo en cero a los rosarinos.
Fuente: Carlos Bustos / SuperTry
Felipe Contepomi: “A veces nos equivocamos en la estrategia y en otras ocasiones falla la ejecución”
En su última presentación del año, Los Pumas perdieron contra Francia por 37-23 en el Stade de France, luego de un mal primer tiempo del seleccionado nacional que...
Leer Más