Es verdad que los Wallabies se ilusionan con el cambio de entrenador, pero Eddie Jones insiste en que no debe ser tratado como el mesías mientras se propone resucitar una era dorada para el rugby en Australia. Si pueden derrotar a Nueva Zelanda en el camino, mucho mejor.
De vuelta en su antiguo terreno de juego de la Escuela Secundaria Deportiva Matraville de Sydney este martes, Jones se mostró optimista cuando se enfrentó a los medios locales por primera vez desde que comenzó su contrato de cinco años el lunes.
Jones dice que esos cinco años, que están marcados con una gira de los Lions en 2025 y una Copa Mundial de Rugby en Australia en 2027, serán fundamentales para remodelar la posición del juego de 15 en Australia.
“Yo no soy el mesías”, advirtió Jones. “Estamos todos juntos en esto, a veces necesitas a alguien que transmita algo distinto para que algo cambie”. A pesar de todas sus audaces declaraciones de este martes, la parte más importante de su mandato es que solo tiene cinco test para preparar un equipo con un récord de 5-9 en 2022 de cara a la Copa del Mundo de este año en Francia. Incluyen dos partidos contra los All Blacks, con Jones ansioso por terminar con la sequía de 21 años de la Bledisloe Cup de Australia más temprano que tarde.
“Ese es un gran objetivo para nosotros porque sabemos que si podemos enfrentarnos a Nueva Zelanda, estamos en una buena posición para ganar la Copa del Mundo”, dijo. “No es el principio y el final porque la Copa del Mundo es el torneo más importante”.
“Ellos [Nueva Zelanda] están en una posición bastante buena, pero los estamos persiguiendo. Los estaremos persiguiendo de cerca, queremos que esa rivalidad sea dura y nos aseguraremos de estar a la altura”.
Jones dice que cualquier renacimiento de los Wallabies comienza con su staff de entrenadores. Dan McKellar y Laurie Fisher son los entrenadores asistentes titulares dejados por el régimen de Dave Rennie, con Jones organizando una concentración con los Wallabies en los próximos días.
El nuevo entrenador de los Wallabies dijo que las contrataciones se harían en función de lo que requieren sus jugadores; jugadores que, según él, solo necesitan creer que pueden derrotar a los mejores del mundo.
“A nuestros jugadores no les falta talento, si hicieras un XV mundial sobre talento, habría unos cuantos jugadores australianos allí”, dijo. “Tenemos que encontrar el nivel adecuado de entrenamiento para los jugadores para que den un poco más”.
Jones emitió una advertencia a los jugadores del Super Rugby Pacific antes del inicio de la temporada el 24 de febrero, diciendo que de acuerdo a lo que vea en esta competencia “seleccionaría o deseleccionaría a los jugadores”.
“Si están preocupados o emocionados, no me preocupa”, dijo. “Si están en su mejor momento en el Super Rugby, entonces estarán en los Wallabies. Entonces estarán contentos, porque emprenderán un viaje para cambiar el rugby australiano”.
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