Ya pasó más de una semana de las elecciones en la Unión de Buenos Aires y la consagración de Carlos Campagnoli como presidente de la entidad porteña reflotó el debate entre profesionalismo y amateurismo en el torneo la URBA.
“El campeonato no debe tener jugadores profesionales. Nuestro estatuto no permite que esto suceda”. Con esas palabras, algo contundentes, se refirió el hombre de Curupaytí con respecto al tema que dividió al rugby local durante todo el año.
Si bien este no es un tema nuevo para la Unión, Campagnoli se mostró firme en sus convicciones y sostuvo la postura que manifestó a lo largo del año y que derivó en la famosa carta de no al Pladar. ¿Pero que pasará con aquellos jugadores que los compongan? “Los que sean desafectados sí podrán jugar. Los que no, no. Creo que van a tener mucho trabajo el próximo año integrando a los Jaguares y a los Pampas en los distintos torneos internacionales”.
A lo que agregó: “Buenos Aires no tiene jugadores profesionales y no debe tenerlos porque el rugby es amateur. Queremos separar bien las aguas y creo que se puede. Si hay un jugador que quiere ser profesional vamos a apoyarlo para que lo sea, pero fuera del club”. Clarito.
Es cierto que en la Unión de Buenos Aires hay varios temas a solucionar para 2011, pero uno de los más primordiales de la lista opositora era los jugadores viaticados y con la renovación de las autoridades enseguida saltó a la luz.
Campagnoli sabe que no será una parada fácil ser el nexo entre clubes, URBA y UAR. “El tema de los Pladares no es nuestro, sino de todos los clubes que han decidido que las cosas sean así. Es un tema importante que tendrán que tratar los clubes. Si se obtiene la mayoría estatutaria para modificar la resolución actual, entonces ese será el camino. Mientras tanto el consejo no puede hacer nada al respecto”, sentenció.
Por: Sebastián Maidana
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