En la antesala al inicio del Rugby Championship y luego de una extenuante temporada para los Jaguares que alcanzaron la final del Súper Rugby, el equipo de Ledesma comenzará a moldear el equipo que afrontará el Mundial de Japón buscando no resentir su estructura. El aporte del Viejo Continente, la clave para potenciar el rendimiento colectivo.
Sin pausa y con el frenético ritmo de estar atravesando un año crucial en la historia del rugby argentino, la gesta de Jaguares en el Super Rugby ya forma parte del pasado, aunque el desgaste de una temporada atípica que comenzó el 3 de enero pasado y tuvo 20 partidos (los 19 del SR y el amistoso de preparación con Uruguay) hicieron mella en un equipo que deberá resetearse por completo.
Consciente de ello y sabiendo que necesita tener a sus mejores hombres conectados en la misma sintonía de cara al Mundial de Japón, Mario Ledesma licenció por esta semana al grupo que viajó a Christchurch para que se desconecten del mundo ovalado y recarguen pilas pensando en otro objetivo de máxima demanda: los All Blacks.
“Es una exigencia tremenda. Nadie quiere especular con eso y vamos por todo. Haber llegado a estas instancias le agrega partidos al equipo, pero entendemos que esto es parte de algo que nos permite llegar de la mejor manera al Mundial”, dijo el Presidente de la UAR, Marcelo Rodríguez, en la previa al duelo con Crusaders.
Con ese escenario planteado, el aporte de los “europeos” será fundamental para encarar este primer compromiso ante los campeones del mundo. En primer término para oxigenar a una primera línea que necesita recambio de calidad para no sufrir en el scrum -Figallo y Herrera serán claves en esa función-, mientras que Facundo Isa aportará su vehemencia para agregarle pimienta a cada ataque desde el fijo.
En el rol de conducción habrá dos aperturas de lujo: Nicolás Sánchez y Benjamín Urdapilleta. El tucumano conoce el sistema como nadie y es el máximo artillero de Los Pumas con 709 puntos en 74 partidos y su experiencia cumplirá un rol preponderante a la hora de generar juego. El hombre de Castres, en tanto, se desgarró recientemente y sería preservado pensando en el cruce ante los australianos, aunque se descuenta que su categoría le añadirá una cuota de valor al equipo.
Por último, Santiago Cordero -elegido el mejor jugador de la liga inglesa-, será clave para otorgarle un descanso acorde a Moyano, Boffelli y Cancelliere, permitir la recuperación de Tuculet y Delguy sin forzar su retorno a la actividad, y probarse en el más alto nivel en un puesto donde abunda la competencia. Sin dudas, una cuota de calidad para un seleccionado que quiere volver a pisar fuerte en una Copa del Mundo.
Por Esteban Chamas (@echamas)
www.aplenorugby.com.ar
Felipe Contepomi: “A veces nos equivocamos en la estrategia y en otras ocasiones falla la ejecución”
En su última presentación del año, Los Pumas perdieron contra Francia por 37-23 en el Stade de France, luego de un mal primer tiempo del seleccionado nacional que...
Leer Más