Es el máximo referente del rugby argentino y hoy, en su rol de dirigente, trata de dejar atrás las peleas entre la UAR y Los Pumas.
Es el máximo referente del rugby argentino y hoy, en su rol de dirigente, trata de dejar atrás las peleas entre la UAR y Los Pumas. A horas del acuerdo entre las partes, le dijo a Clarín.com: “Cada uno debe actuar con mesura y prudencia, pensando en el bien común del deporte que amamos”.
Hugo Porta fue el mejor jugador argentino de rugby de la historia, y ahora, en su rol de dirigente, habló con Clarín.com sobre el acuerdo que finalmente llegaron los jugadores y la UAR, en este conflicto que dio mucha tela para cortar en los días. “Todos salimos fortalecidos”, aseguró Porta, hoy en su rol de vocal titular y presidente de la Subcomisión de Relaciones Internacionales.
“Creo que todas las partes debemos actuar con prudencia y mesura, pensando en el bien común del deporte que amamos”, afirmó.
_¿Te sorprendió la segunda carta de Los Pumas?
_Me sorprendió porque, de acuerdo a lo informado por los interlocutores que el Consejo ha designado, las demandas planteadas por un grupo de jugadores han sido satisfechas.
_¿Estás de acuerdo con los contratos individuales propuestos por la UAR? Concretamente, ¿cuáles son las cláusulas que a los jugadores no los dejaban conformes?
_Me parece correcto y natural que los jugadores profesionales se relacionen con la Unión Argentina de Rugby a través de un contrato, acuerdo o como se lo quiera llamar. La UAR es desde hace 107 años la institución madre del rugby y por lo tanto todo acuerdo contractual debe pasar por ella. Fortalecer las instituciones siempre es importante. Creo que todas las partes debemos actuar con prudencia y mesura, pensando en el bien común del deporte que amamos.
_¿No consideras que es necesario que tanto el presidente Risler como el secretario Sanz tengan un diálogo permanente con los jugadores?
_No tengo dudas de que un diálogo ordenado sería muy constructivo. Y creo que ambos tienen la decisión de llevarlo adelante, obviamente desde su lugar de dirigentes que tienen que pensar en el bien común de una comunidad de más de sesenta mil jugadores que a lo largo y ancho de la Argentina conforman el rugby nacional.
_Muchos hablan de que vos podrías ser un buen interlocutor entre las partes. ¿Lo sería?
_Yo soy miembro del Consejo de la Unión y mi responsabilidad son las relaciones a nivel internacional. Ya se designó a las personas que deben mantener un diálogo fluido con los jugadores. Creo, de corazón, que para eso están las instituciones y los dirigentes, para ordenar y propiciar el diálogo. Se logró un acuerdo y así el rugby argentino salió fortalecido, porque no olvidemos que crisis, en chino, tiene una doble acepción: también es una oportunidad.
¿Que piensa del reclamo de los Classics, de las duras palabras de Branca: dijo que lo trataron de ladrón.
_No me gusta el empleo de esos términos. Están muy lejos del espíritu que me enseñó el rugby. Creo que los Classics podrían cumplir una labor importantísima en la difusión y enseñanza del juego que tanto disfrutaron. De todas maneras pienso que lo importante es jerarquizar a los Pumas Classic y creo que los que integren ese equipo deberían haber vestido la camiseta de los Pumas anteriormente.
_¿Está conforme con su trabajo en la UAR? En algún momento, con todo este conflicto, ¿pensaste en dar un paso al costado?
_Cuando asumo una responsabilidad así fue también durante mis años de jugador- lo hago sabiendo que uno debe admitir opiniones contrarias, pero los partidos se juegan hasta el último minuto. Como hombre del rugby, nunca renuncié adentro de una cancha y tampoco lo voy a hacer afuera.
Por Patricio Connolly, de la Redacción de Clarín.com