La Unión Irlandesa de Rugby (IRFU) anunció un importante cambio en su modelo financiero: a partir del 1 de agosto de 2026, las cuatro provincias (Leinster, Munster, Ulster y Connacht) deberán cubrir el 40% del costo de los contratos de los jugadores nacionales, un aumento respecto al 30% actual.
Este ajuste surge tras una revisión del panorama económico del rugby irlandés, con el objetivo de mantener a sus equipos provinciales y a la selección nacional en un alto nivel de competencia.
David Humphreys, director de rendimiento de la IRFU, explicó que este nuevo esquema busca equilibrar las necesidades del rugby de elite con un modelo sostenible a largo plazo. Además, los fondos adicionales que se recauden se invertirán en los programas de desarrollo de Connacht, Munster y Ulster.
“El rugby está cambiando y debemos adaptarnos. Este nuevo modelo nos permitirá seguir siendo competitivos y reforzar nuestras estructuras desde las bases hasta el máximo nivel”, dijo Humphreys.
La IRFU también confirmó que comenzó una auditoría de eficiencia interna con el apoyo de Portas, una consultora especializada en gestión deportiva. El objetivo es optimizar recursos y garantizar que cada euro invertido tenga el mayor impacto posible en el desarrollo del rugby irlandés.
Kevin Potts, CEO de la IRFU, fue claro:
“La sostenibilidad financiera es un desafío global. Este ajuste no se trata de recortes, sino de enfocarnos en prioridades estratégicas que aseguren el futuro y el crecimiento del rugby en Irlanda”.
Este nuevo paso se enmarca en el plan estratégico a cinco años de la IRFU, que apunta a seguir compitiendo en la élite mundial mientras se fortalecen las bases del juego en todo el país.
rugbylad.ie
Créditos: rugbylad.ie