Con la victoria de este domingo ante Universitaro el Jockey de Villa María se aseguro el quinto puesto.
Dos realidades que permiten dos diferentes visiones de lo acontecido. Dos etapas de un partido donde el peso de la actitud de los protagonistas fue tan relevante que les permitió liderar a cada uno un segmento. Dividir en dos al cotejo permitirá entender este encuentro donde el que empezó mejor terminó peor y viceversa.
En el primer capítulo con Bonamicci y Alvarez como líderes, Universitario, a pesar de tener el viento en contra se las ingenió para poner en aprietos a la estructura hípica. Liderando en el line, imponiendo potencia en los scrums y rigurosidad en los contactos, los cordobeses hacían diferencias en el tanteador que aunque mínimas les permitían, por un lado, tener controlado a su rival en el terreno de juego y por otro pensar prospectivamente en estirar cifras de persistir estas condiciones. Jockey Club, en tanto, hundido en sus dudas, lucía desconcentrado y vulnerable. Sin poder definirse en los fijos y móviles y demostrando poca profundidad en sus ataques con los backs. El futuro inmediato de los hombres de verde no resultaba demasiado promisorio. Con una U en alza y un hípico a los tumbos, caía el telón del entretiempo.
Asegurándose el quinto
Recuperando el protagonismo en las formaciones fijas, trabajando en la neutralización del maul ofensivo cordobés, fogoneando el desarrollo y progreso en el terreno a través de esta misma vía y finalmente condimentando todo lo expuesto con una alta dosis de actitud, los jugadores del Jockey Club, durante la segunda parte dieron un golpe de timón al encuentro. Cuando el equilibrio y la paridad parecían inamovibles, apareció en el verde la solvencia de los más experimentados para provocar el desequilibrio, para imprimirle al andamiaje del local la inyección de ánimo y actitud necesaria para imponerse con comodidad frente a un rival complicado que vio desbaratada por completo sus posibilidades cuando el dueño de casa apretó el acelerador y lo arrinconó en su porción de terreno.
El final encontró, a la inversa que al principio del juego, a los villamarienses controlando las acciones y consolidando en definitiva un triunfo que da aire y esperanzas para encarar la próxima y decisiva etapa.
Escribe: Fernando de Goycoechea – El Diario de Villa María – http://www.eldiariocba.com.ar
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