Río 2016 está cada vez mas cerca. El rugby volverá a jugarse por primera vez desde 1924. Alejado del movimiento olímpico, tuvo que trabajar duro para que fuera nuevamente aceptado como deporte de competencia. Pero la historia mas completa del rugby y como comenzó la movida olímpica te la contamos aquí. Si estás en duda, quedan tickets para el rugby olímpico: https://ingressos.rio2016.com/
El sucesor de Vernon Pugh QC, fallecido tempranamente en 2003 cuando aún tenía mucho por hacer por el rugby, fue el Dr. Syd Millar, de Irlanda, reconocido por sus días como fortísimo pilar de su país y los British Lions, además de luego ser el entrenador de ambos equipos.
Millar continuó la campaña en busca de la readmisión olímpica con renovado vigor. Los esfuerzos del IRB reflejaron la renovada visión global del mundo del rugby, llevándolo a la inclusión en otras revisiones del COI en 2005 para los Juegos de Londres en el 2012.
Aún habiendo quedado en la lista final de deportes candidatos a ingresar a los Juegos, el COI decidió nuevamente no introducir nuevos deportes y el objetivo nuevamente quedó tentadoramente fuera de alcance. Afuera quedaron junto al rugby el golf, el karate, el squash y deportes en patines.
Nace el rugby femenino en Sudamérica
Para aquella fallida revisión que se llevó a cabo en Singapur, el rugby debía demostrar que se jugaba en todas las regiones del mundo por varones y mujeres.
Así fue que, a las apuradas, se armó el primer Sudamericano Femenino hacia fines del 2004 en la ciudad de Barquisimeto.
En ese iniciático primer torneo Brasil fue el dominador, venciendo al local, Venezuela, en la final. Colombia venció a a venció a Argentina en el partido por el tercer puesto. Esa tendencia regional no se modificó ya que al día de hoy Brasil sigue siendo el dominador, Colombia jugará también en los Juegos y tanto Venezuela como Argentina participaron del último repechaje olímpico.
En marzo, cuando se inauguró el estadio olímpico de Deodoro todavía quedaban en actividad un manojo de jugadoras de Brasil, Argentina y Venezuela que habían estado en aquel iniciático fin de semana de mucho calor venezolano. Por Brasil irán a los Juegos Baby Futuro, Paulinha Ishibashi y Julia Sarda, mientras que Natasha Olsen, integrante de aquel equipo, estará colaborando con los referís en Río 2016. Además, la venezolana Ingrid Griffin sigue en el seleccionado que ahora conduce la capitana de entonces, Marisell Méndez.
Hubo un renovado empuje, habiendo aprendido las lecciones de 2005 para volver a intentar el ansiado ingreso olímpico.
Lobby olímpico
Se trabajó por mejorar al deporte en su alcance global, en ambos géneros, y para la presentación final, en la 121ª Sesión del Comité Olímpico en Copenhague, en octubre de 2009, se formó una selección de siete representantes para convencer al Comité Olímpico Internacional de los beneficios de sumar al rugby a los Juegos de Río.
Fue muy exitosa la gestión de llevar de veedores del Comité Olímpico Internacional al Mundial de Seven que se jugó en marzo en Dubai. Allí vieron, analizaron y disfrutaron lo que es el seven en una de las ciudades que mas se disfruta el rugby reducido y sus informes fueron por demás positivos. Datos como los 760 millones de espectadores en 141 países, a través de 29 distintas empresas televisivas en 14 idiomas fueron un dato ineludible
Copenhague
Claro que con eso no alcanzaba y había que convencer al plenario del Comité Olímpico que se reunió en la capital de Dinamarca. Antes de la decisión de los nuevos deportes olímpicos se había elegido a Río como sede para este 2016.
Una vez decidida la sede y como una acción mas para convencer
a los votantes se armó un video de invitación con tres jugadoras del equipo brasilero.
En él, Babi Rodrígues Santiago y las hermanas Futuro, Cris y Baby (que jugará en los Juegos en su ciudad) fueron mas que elocuentes.
Claro que con ello no alcanzaba y además del gran lobby para que el rugby se convirtiera en olímpico, se armó un gran equipo de seven que hizo la presentación ante los poderosos miembros COI.
Presentando el rugby estuvieron el Presidente del IRB Bernard Lapasset (cesó en sus funciones a fin de junio con un enorme legado), el CEO (hasta 2012) Mike Miller, el hoy vicepresidente de World Rugby Agustín Pichot, el fallecido Jonah Lomu, Cheryl Soon, capitana de Australia, primer campeón del mundo femenino unos meses antes, el capitán de Kenya Humphrey Kayange y Anastassiya Khamova, jugadora y referí en Kazajistán.
Con este septeto se cubrían todos los aspectos – dirigentes, ex jugadores, estrellas, jugadores actuales y sobre todo había representación femenina que había sido el talón de Aquiles en la elección anterior.
Yes, 81. No 8…Ese fue el número de votos sobre 89 que le dieron el visto bueno al rugby para el regreso.
La alegría de esos siete era la alegría del rugby mundial ya que a partir de esa decisión, el mundo del rugby recibió un envión que lo lleva a tener hoy 7,73 millones de jugadores registrados y muchísimos mas disfrutando de nuestro.
Ingresar a los Juegos significó que muchos de los países en membresía del hoy World Rugby, y mismo muchos aún no miembros, pudieran acceder a financiación a través de los comités olímpicos nacionales.
El impacto se sintió casi instantáneamente y pronto se convirtió en un deporte de enorme interés televisivo y de espectadores en los distintos juegos multideportivos – Commonwealth (ya se jugaba) Asiáticos, Panamericanos, del Pacífico y Africanos.
Es indudable que el rugby tomará un envión inusitado cuando el primer balón comience a rodar, nuevamente aunque en su versión de siete jugadores, en el estadio de Deodoro, en las afueras de Río de Janeiro, el 6 de agosto.
Próxima entrega: de Coubertin y el rugby olímpico
Textos originales de Chris Thau; traducidos, adaptados y actualizados por Frankie Deges
Tercera entrega de la historia olímpica del rugby cuando nos acercamos a @rio2016_es https://t.co/xqRTahbbO3 pic.twitter.com/WDM7Z2qUYE
— Sudamérica Rugby (@sudamericarugby) 11 de julio de 2016