Todo el equipo estuvo presente en el cementerio de Caterpillar Valley, cerca de Longueval, donde se encuentra el Monumento Nacional de Nueva Zelanda.
El monumento fue erigido como homenaje a los 1.205 soldados neozelandeses que murieron durante la Batalla del Somme en 1916.
Una de las batallas más mortíferas de la historia de la humanidad.
La Batalla del Somme fue una de las batallas más grandes y sangrientas de la Primera Guerra Mundial (1914-18). El primer día del ataque, el 1 de julio de 1916, el ejército británico sufrió 57.000 bajas.
La campaña finalmente terminó a mediados de noviembre después de una agonizante lucha de cinco meses que no logró lograr un gran avance.
El capitán y ala de los All Blacks, Sam Cane, depositó una corona de flores en el monumento a los soldados neozelandeses desaparecidos y el equipo rindió homenaje a los caídos con una haka.
El experimentado segunda línea Sam Whitelock también entregó una camiseta de los All Blacks en memoria de Robert Stanley Black, que era el All Black número 211 y que perdió la vida en el Somme.
Partido inaugural contra Francia
Los All Blacks aspiran a ganar la Webb Ellis Cup por cuarta vez. Se enfrentarán a la nación anfitriona en un muy esperado inicio del torneo en el Stade de France en París el viernes 8 de septiembre.
Ahead of the Rugby World Cup, the All Blacks perform the haka at Longueval Cemetery in honour of fallen New Zealand soldiers from the First World War. (One of our leading historians, Pete Smith, had the honour of escorting them around the battlefields of the Somme.) #RWC2023 pic.twitter.com/alUeHVB6aP
— Mat McLachlan \ Battlefield Historian (@MatMcLachlan) September 1, 2023