El seleccionado argentino sería el invitado de lujo en 2021 en Twickenham, pero el combinado británico-irlandés debe destrabar primero una batalla multimillonaria ante la Premiership inglesa.
El foco del rugby internacional está hoy puesto en lo que será el Mundial de Japón, pero hay algunos diagramando un poco más allá y brindando una pelea en los escritorios que todavía no parece tener una definición.
En 2021, Lions partirá a Sudáfrica para disputar una serie de tres tests ante los Springboks. El primer partido con los Boks será ya con el nuevo calendario de World Rugby, el 3 de julio, postergando un mes la primera ventana internacional.
Mientras tanto, los dirigentes de Lions intentan confirmar un partido preparatorio, que se jugaría en Twickenham. Los invitados serían Los Pumas, aunque Francia también tiene posibilidades.
La principal traba del reconocido combinado está con la Premiership. La liga inglesa, al momento, se niega a liberar una semana antes a los jugadores convocados y a correr de su calendario la definición del torneo, a lo que sí accedió el Pro 14. De no llegar a un acuerdo, el amistoso podría suspenderse.
Warren Gatland ya experimentó complicaciones en la última travesía a Nueva Zelanda, en 2017, cuando llegó apenas tres días antes del primer partido frente a Provincial Barbarians a la tierra de los All Blacks.
Además del partido, entran en juego unas 10 millones de libras esterlinas que generaría el evento, entre tickets, derechos de televisión y patrocinadores. Un negocio demasiado grande del que Los Pumas esperan formar parte.
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