Después de ir perdiendo 19 a 0 los Tordos dio vuelta el partido y derroto por 22 a 19 a Maristas.
Habrá que creer que Los Tordos le encontró la vuelta a Marista. En el superclásico de ayer, todo parecía a pedir de Marista. Los Curas ganaban por 19 a 0 la primera etapa, y así estuvieron buena parte del segundo tiempo, pero Los Tordos le dio vuelta el partido, en 20, y con la victoria en tiempo de descuento por 22 a 19 (4-1), se acercó mucho al récord del pentacampeonato.
Explicar las razones de este triunfo no es tarea fácil, pero lo que sí es indiscutible es la vocación de no bajar nunca los brazos y la convicción de saber que el partido no se termina hasta que el árbitro lo indica. Para muchos, mentalidad de campeón.
De movida, Marista impuso el orden de las acciones. Se lo vio más ofensivo, con Carrasco organizando ataques, y buscando siempre por afuera. Del otro lado, Los Tordos apareció errático con las manos y buscando el juego con sus delanteros, donde no sacó grandes diferencias.
Marista fue impenetrable. Con una defensa sudafricana los Curas no sólo tacklearon todo, sino que recuperaron muchas pelotas. Tordos hizo una infinidad de penales, y Roccuzzo los capitalizó con el pie, aún errando algunos intentos.
Olivieri y Diego Pincolini, más la tercera línea completa de los Curas fue lo mejor, y justamente el wing apoyó el único try de la primera parte.
El parcial cerró 19 a 0 para la visita, que parecía definitivo. Nasazzi dejó el campo y Dutto aportó su fortaleza.
Pero Los Tordos, por algo es el campeón. En la segunda parte, los Pájaros salieron atacando desde su propio campo, con la premisa de dar vuelta el resultado. Una vez más la defensa tricolor fue efectiva, pero empezó a dar signos de cansancio, y a Los Tordos lo detuvo más sus propios penales que otra cosa.
A los 24, Federico Genoud, aprovechó una patada al fondo de Torre, y algunos errores del cierre adversario, para marcar el primer try de Tordos.
Diez minutos más tarde, Raholín (otro que anduvo bien), apoyó otro try para el local, volando como wing -es pilar-, por punta derecha.
Pero el nocaut llegó 2 después, tras un error en la cobertura de Federico Pincolini, que le dio el line a Tordos, y Torre tradujo en try por la punta.
Parecía empate sellado en 19. Marista tuvo su chance de penal, pero Roccuzzo falló, y ya con 4 de descuento, Bruno metió su chance, repitiendo el resultado de la primera ronda.
Fuente: Diario Los Andes – Mendoza
http://www.losandes.com.ar/2005/0725/deportes/nota263897_1.htm