La espera va llegando a su fin para el Seleccionado de Menores de 18 años. Tras cuatro años de trabajo, el tiempo de ver lo sembrado será durante el fin de semana en las instalaciones de la Boya.
Para Lucas Borges, el líder al frente del criatura, la ansiedad y los nervios que se viven en la previa son los lógicos en la antesala de un acontecimiento de semejante dimensiones y es por eso que, conociendo la materia prima con la cual cuenta, su optimismo se transforma en la tranquilidad del saber que el seleccionado llega en buenas condiciones.
“La preparación fue conforme a lo que habíamos planificado. Estuvimos entrenando con el Seleccionado Mayor lo cual nos da una competencia de mayor nivel y ahora esperando porque llegue la competencia con los nervios y ansiedades que eso genera.”, señaló Borges, quien comparte dupla con Diego Rodríguez.
Tras una semana de aclimatación al contexto olímpico, el ex jugador de Los Pumas y Los Pumas Pumas 7s, destacó las bondades del cronograma de los Juegos, el cual le dio la posibilidad a los chicos argentinos de competir a partir del fin de semana: “Estamos bien. De a poco nos empezamos a ver con los rivales acá en la Villa Olímpica y los chicos ya empiezan a medirse. Creo que nosotros tuvimos la suerte que nuestra competencia no se dio en los primeros días así que pudimos adaptarnos a lo que es la vida en la Villa Olímpica y disfrutar de los Juegos.”
El cuadro masculino lo integran, además de Argentina, los seleccionados de Francia, Sudáfrica, Japón, Samoa y Estados Unidos. Al respecto, Borges señaló que: “Sabemos poco de nuestros rivales. Contra Sudáfrica jugamos hace un año contra dos equipos de los cuales armaron el plantel que vino a los juegos y tienen un buen nivel. De Francia vimos su clasificación y son un equipo muy fuerte. De Samoa y Japón no tenemos antecedentes y justo son los dos primeros equipos con los cuales nos vamos a enfrentar en el primer día.”
“El objetivo siempre es el más alto. Más allá de que no conozcamos a los otros equipos, siento que el nuestro es un muy buen equipo. Entrenamos con el Seleccionado Mayor y tuvimos un buen rendimiento y el equipo respondió. Obviamente tenemos un poco de incertidumbre, la cual sin dudas se va disipar cuando arranque el torneo.”
Para Borges y sus dirigidos, el objetivo en cuanto a los resultados tiene en foco la medalla dorada. Sin embargo, más allá de lo que suceda, la posibilidad de poder competir en un juego olímpico ya resulta premio suficiente para un equipo que buscará hacer historia frente a su gente.
Con el rugby sevens empezando mañana en #BuenosAires2018, vemos como se preparan el equipo de @unionargentina para el torneo en que veremos al futuro del rugby mundial competir por la medalla pic.twitter.com/XeOP62Zq2d
— World Rugby ES (@WorldRugby_ES) 12 de octubre de 2018
Comunicación UAR