En la Bodega Dante Robino, en Mendoza, donde presentó el vino Pequeñas Sociedades junto a su hermano Pedro y Rodrigo Roncero, el ex hooker rompió el silencio para contar como vive esta nueva etapa en la que, al menos por ahora, el entrenador profesional pasó a un segundo plano detrás del padre de familia y el emprendedor, aunque sigue vinculado al juego en otras funciones.
¿Cómo fueron estos dos años después de tu renuncia a Los Pumas?
La verdad, muy buenos. Volviendo a conectar con la familia, sobre todo. Cuando uno falta tanto en casa, perdés conexiones con tu mujer, con tus hijos y al principio es como que estás de invitado. Y vos ves que en tu casa toman decisiones sin vos, porque están acostumbrados a funcionar sin vos. La verdad que ahí te das cuenta también la falta que hiciste. Y fue una de las cosas que también me dio la tranquilidad de decir, bueno, la decisión que tomé fue la acertada familiarmente. Te diría que más que nada ha sido volver a disfrutar de cosas chiquititas, cumpleaños, bautismos, casamiento, fiestas de fin de año, reuniones con los profesores. Todas cosas que durante mucho tiempo no pude hacer.
Y fuera del rugby, además de este proyecto con el vino ¿qué otras cosas estás haciendo?
Pusimos un stud en San Isidro con Pedro (Ledesma) y Rorro (Rodrigo Roncero), de caballos de carrera, con el que estamos arrancando muy bien. Es algo muy divertido y muy desafiante, un mundo nuevo. Y creo que también cuando salís un poco del rugby profesional tratás de lanzarte a otros desafíos, porque también es lo que hiciste toda tu vida. Después, en el rugby, estoy de asesor en una franquicia de la MLR (Dallas Jackals en la Major League Rugby de Estados Unidos) desde el año pasado.
¿Cómo ha sido esa experiencia?
Voy y vengo, de vez en cuando. Ese era el arreglo porque la verdad yo no estaba para hacer más que eso. Me ofrecieron varios equipos de Francia y también los reboté. La decisión era no irse. La verdad es que familiarmente es muy difícil. Tengo una hija que está muy bien en la facultad, un hijo que le gusta mucho su rugby y está terminando el colegio, dos hijos más, los viejos grandes, mi suegra grande, así que nada. La decisión es vivir en Argentina.
¿Cómo viste a la la MLR?
Me parece más dura que el Súper Rugby Américas, el nivel es más elevado y físicamente es muy dura, con muchos sudafricanos, samoanos y tonganos. Está creciendo, pero no sé si a nivel negocio o de la participación del público. Tampoco tiene un impacto grande en el rugby internacional de Estados Unidos, que es una de las cosas en las que debería tenerlo. Porque el Súper Rugby Américas es muy exitoso desde ese lado metiendo a Chile y Uruguay en el Mundial, mientras que Canadá y Estados Unidos quedaron afuera. O sea que poniendo una competencia contra la otra, y encima que es una competencia supuestamente más profesional y con más equipos, la verdad es que no funcionó como se esperaba y creo que tienen muchas cosas para replantearse.
¿Vas a seguir?
En principio sí, siempre que el arreglo sea no estar tanto tiempo afuera.
¿Y de rugby qué otras cosas has hecho? ¿Estuviste ayudando en el Seven en la URBA?
Empecé ayudando y salieron campeones, pero no pude viajar a Paraná por un tema familiar. Fui a los entrenamientos y la verdad es que estuvo buenísimo. En realidad iba a pasar un buen rato con Tati (Phelan), Luquitas (Borges) y Pedro Candotti, que son amigos míos.
¿Estás vinculado con la URBA?
No, pero es como que me da lástima que se haya perdido un poquito la identidad de la URBA. Veo que hace rato que en el Interacademias muchas veces no gana o en el menores de 18 no salieron campeones ni este año, ni el anterior y me da un poco de cosa. Me parece que el interior creció más que la URBA.
¿No tendría que buscarse la vuelta a que se juegue otra vez el Campeonato Argentino?
Entiendo que siempre hay un montón de gente pensando cómo se puede hacer para jugarlo. Para mí uno de los puntos altos del año era jugar el Argentino. Estaba buenísimo venir a jugar con Buenos Aires a las provincias. Vos te recibías de equipo duro si ibas a ganar a Tucumán, por ejemplo. Y eso hoy no pasa. No sé si es bueno para el rugby argentino o si es malo, realmente no lo tengo claro. ¿Se puede hacer? ¿No se puede hacer? A mí me gustaría y después es lo que se hace en todo el mundo. Si vos te fijás Leinster, Munster, Edimburgo, Glasgow, son todos equipos provinciales. Ni hablar el Súper Rugby. A mí me encantaría, pero entiendo que por algo no se hace. Yo no estoy en el círculo donde se toman las decisiones.
¿Cómo está Curupaytí?
Estoy en la Subcomisión de rugby y ayudando al plantel superior y este año metimos, de los seis equipos del plantel superior cinco en playoffs. La verdad que el club está lindo, divertido y lo estoy disfrutando desde otro lugar, tratando de ayudar a los entrenadores.
¿Es difícil ser entrenador profesional si no estás dentro de la estructura de la UAR?
Totalmente, pero yo tenía muy claro que eran Los Pumas y después se terminaba. De hecho, el año pasado me ofrecieron Clermont, Perpignan, Castres, Fiji, Georgia, Portugal, este año Montpellier. Y a todos les dije que no, porque familiarmente no lo puedo hacer. Y en Argentina es imposible, no lo haría. Yo no entrenaría a otro que no sea mi club y las veces que voy a otros clubes es por que un amigo que me llama y me dice ‘Vení a darnos una mano’ con el scrum, con el maul, la defensa, el ruck o lo que fuera. Voy, hago un entrenamiento, me como un asado y me doy por pago. Para mí, el rugby profesional, y entiendo que mucha gente sí lo haga, no está en Argentina.
La trayectoria de Mario Ledesma
Como jugador
Curupaytí 1991-2001
Narbonne (Francia) 2001-2003
Castres (Francia) 2003-2005
Clermont (Francia) 2005-2011
Los Pumas 1996-2011
También integró seleccionados juveniles, mayores y de seven de Buenos Aires, Los Pumitas, Los Pumas 7s y el seleccionado argentino en el Mundial Universitario.
Como entrenador
Asistente
Stade Francais (Francia) 2011-12
Montepellier (Francia) 2012-13
Waratahs (Australia) 2014-15
Australia 2014-17
Como head coach
Jaguares 2018
Los Pumas 2018-21
El Mundial, Sudáfrica y Australia
¿Fuiste al Mundial?
Sí, fui al Mundial y creo que fueron los mejores cuartos de final de la historia. Sobre todo los dos que venían por el otro lado de Los Pumas. De hecho, me parecía que no me podía perder eso. Y de alguna forma yo también, hasta sentimentalmente, tenía que cerrar mi ciclo con Los Pumas en el Mundial, desde donde me tocara. Así que fui al partido de Marsella y estuve con el staff y los jugadores. La verdad es que yo tengo muy buena relación con todos y lo disfruté como pude, porque también es difícil haber dejado a un año del Mundial. Y en el juego me pareció como un Mundial a dos velocidades, los que venían por un lado del cuadro y los que venían por el otro.
¿Qué te pareció Sudáfrica?
Lo de Sudáfrica, va a sonar raro, pero me parece súper innovador. En el sentido de cómo manejan la semana los entrenadores, cuándo anuncian el equipo, el armado del banco. Condicionaban a todos los equipos, desde lo que decían hasta lo que hacían. Te ponen un banco 7 y 1. ¿Y yo qué hago? ¿Qué le pongo? 5 y 3, 6 y 2, 7 y 1. Que las luces, que no las luces, cómo declaraban o cómo dejaban de declarar y finalmente son campeones del mundo y dos Mundiales seguidos. Para mí el staff sudafricano y sobre todo Rassie Erasmus, son tipos que están un paso adelante en cuanto a la manipulación de la prensa, de los otros entrenadores, de los otros equipos. En el armado del equipo contra Francia, le ganan la pulseada con el banco. Y los flacos van a la final del Mundial 7 y 1. Yo digo, ‘está loco, ¿y si se lesiona Faf De KlerK en los primeros minutos?’. Pero no se lesionó y salieron campeones. Más allá de si pateaban mucho o no, nosotros hemos compartido con ellos en pandemia, en Australia, estuvimos encerrados en un mismo hotel dos semanas y compartimos un montón de charlas para que nos explicaran cómo entrenaban, cómo dejaban de entrenar, cómo analizaban. Es un staff que no deja nada librado al azar y eso garpa. Por más que ganaron ajustados, ganaron. Y después hay 3 o 4 tipos que son los mejores jugadores del mundo. ¿Quién puede discutir que Du Toit (Pieter Steph) no es uno de los mejores tercera línea del mundo? ¿Viste lo que jugó? Es una cosa impresionante. O Kolbe (Cheslin), o el otro wing (Kurt Lee Arendse). O Pollard (Handré) que viene sin partidos y de repente termina siendo súper importante, o Kolisi (Siya) que se había roto los cruzados 4 meses antes del Mundial.
Y Australia que vos lo conocés bien, ¿qué te pareció?
Tiene mucho despelote interno, evidentemente. Tienen problemas de plata y la ponen toda en un entrenador y descuidan lo otro. Falta liderazgo. Llevaron un equipo súper inexperimentado con un diez que no había jugado nunca en los Wallabies y menos en un Mundial. Y dejaron afuera tipos como, no te digo Quade Cooper, pero Foley (Bernard). ¡Lo dejaron afuera a Hooper! Yo trabajé con él 4 años y para mí de los líderes más importantes que me ha tocado, por lo menos ver de cerca, en mi carrera. Y vos fíjate, tanto era el quilombo que Eddie Jones estaba firmado hasta el 2027 y se fue, dijo no me voy a Japón y a los dos días se fue a Japón. Tiene muchas cosas que resolver adentro de la cancha pero te diría que tiene más para resolver afuera.
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Créditos: UAR
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