“Como estoy tan o más motivado que cuando debuté, frente a Japón en abril de 2005, daré pelea”, declaraba Juan Manuel Leguizamón a principios de este año cuando se le consultaba sobre la posibilidad de jugar su cuarto mundial en 2019. Lejos de achicarse por arrancar la temporada relegado por una lesión, cuando le tocó ingresar se destacó y terminó adueñándose de la camiseta número 8 de Los Pumas en la ventana de junio.
Tercera línea incansable y con una entrega sin medida, el santiagueño ya fue parte de la máxima competencia internacional en tres oportunidades. En Francia 2007, donde fue parte del histórico tercer puesto, en Nueva Zelanda 2011, cuando el equipo conducido por Santiago Phelan perdió ante los locales y posteriores campeones en cuartos de final y en Inglaterra 2015 donde el seleccionado argentino sorprendió siendo cuarto.
Con 77 Test Match con Los Pumas, de los cuales fue titular en 60 oportunidades, se ubica sexto en la tabla histórica de jugadores con mayor cantidad apariciones con la celeste y blanca. En su largo recorrido con el seleccionado ganó en 31 oportunidades y cayó en 46.
El camino por los clubes no ha sido menos extenso. Arrancó en su Santiago del Estero natal jugando en Santiago Lawn Tennis Club. En dicho club tuvo la invaluable experiencia de compartir equipo junto a su hermano Gonzalo y su padre Juan Carlos.
En busca de un salto en la exigencia diaria fue que se trasladó a Buenos Aires para jugar en el San Isidro Club. En 2005 comenzaría su experiencia en el plano profesional jugando para London Irish de Inglaterra. Luego le llegaría el turno de medirse en el rugby francés, donde fue parte del Stade Francais y más tarde del Lyon como última estación de esta gira. 2016 sería el año del retornó a la Argentina para ser parte de Jaguares en las últimas dos temporadas del Super Rugby.
En plena preparación para el Rugby Championship Legui se hace un lugar y responde a todo.
¿Qué significan Los Pumas en tu vida?
Los Pumas para mí, es algo difícil de explicar. Las cosas que he vivido desde el día en que me puse la camiseta por primera vez son difíciles de describir. He trabajado mucho para llegar a vestirla y una vez que te la pones no querés sacártela más. Es algo único. Me ha tocado vivir de todo estando con Los Pumas, son 13 años ya, pero cada cosa tiene lo suyo. Más allá de que algunas parezcan ser negativas, les saco el jugo y las transformo en aprendizajes y experiencias positivas. Todo, absolutamente todo, suma.
¿Qué balance haces de lo que fue este segundo año de los Jaguares en el Super Rugby y cómo lo ves en comparación con el primero?
El balance es positivo desde mi punto de vista, seguimos aprendiendo y acumulando vivencias únicas. Somos muy afortunados de tener la posibilidad de jugar en Jaguares y en el Super Rugby. Vamos aprendiendo y se van viendo mejoras y signos de adaptación a esto tan nuevo. No tengo dudas q los próximos años serán mejores aún e iremos corrigiendo cosas a través de las experiencias vividas.
Mientras en Jaguares arrancaste el año relegado, en Los Pumas fuiste titular en ambos test con Inglaterra y uno de los puntos más altos del equipo como octavo. ¿Cómo ves al equipo para el Rugby Championship y cómo te sentís vos desempeñando esa posición?
Si, empecé el año con dos lesiones que no me dejaban arrancar. Por suerte las fui superando y pude empezar a jugar cada vez más, sabía que lo iba a superar y que la oportunidad iba a llegar. Por suerte pude jugar los dos tests matches con Inglaterra, pero sé que quedamos en deuda esos partidos más allá de que hubo cosas positivas. No pudimos concretar varias ocasiones y terminamos perdiendo ambos. Hay que seguir trabajando, está claro que no alcanza con lo hecho. Si, jugué de 8 en los dos encuentros, es un puesto que me gusta mucho, en mis 10 años en Europa la mayoría de los partidos los jugué en esa posición y muchos partidos con los Pumas también.
Tengo entendido que tenés contrato con la UAR hasta diciembre ¿Ya empezaste a hablar con la UAR? ¿Cuáles son tus planes para el año que viene?
Sí, tengo contrato hasta diciembre del 2017. No sé nada aún respecto a mi futuro. Lo que si tengo claro es que tengo muchas ganas de seguir jugando un buen tiempo más.
Las ganas se traducen en potencia y ese impulso es el que lleva a un jugador como Juan Manuel Leguizamón a seguir rompiendo los tackles del destino. Un metro más, pero siempre para delante. Como lo hace un Puma de verdad, en la cancha y en la vida.
Por Ramiro Pemán – @ramiropeman
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