Nicolás Sánchez, la figura de los Pumas en la victoria ante Irlanda, llama a no conformarse con lo conseguido hasta aquí. “Decíamos que nuestro objetivo era llegar a cuartos de final, pero realmente nuestro objetivo era llegar a semifinales”, dijo el goleador.
Cuando metió una conversión desde el touch que dejaba el partido prácticamente definido (33-20 a 12 minutos del final), el 10% de argentinos que había en el Millennium Stadium se hizo sentir. “¡Nico, Nico!”, cantaban. Y cuando se consumó la victoria, sus compañeros lo llevaron en andas. “Lo escuché, pero es un momento lindo para el equipo. No es algo personal sino que hay que disfrutarlo todos”, dijo el protagonista.
Con 23 puntos y una gran conducción, Nicolás Sánchez fue la figura de los Pumas en la victoria 43-20 ante Irlanda, que valió el pase a la semifinal del Mundial de Inglaterra 2015, la segunda vez que la Argentina se mete entre los cuatro mejores. Una actuación determinante dentro de una performance colectiva que combinó momentos de brillantez con un soberbio cierre del encuentro.
“Es un sueño cumplido por ahora. Decíamos que nuestro objetivo era llegar a cuartos de final, pero realmente nuestro objetivo era llegar a semifinales”, continúa el hasta aquí segundo goleador del Mundial, detrás del eliminado escocés Greig Laidlaw. “Ahora hay que aspirar a ir por todo y no conformarse con esto”.
-¿Ya se puede decir que están a la altura de las potencias del sur?
-No es el momento de creérsela. Los otros rivales son más fuertes que nosotros. El equipo se va sintiendo de a poco cómodo. Jugamos a lo que queríamos: mover la pelota, encontrar los espacios por afuera, teniendo buenas formaciones fijas. Eso es lo más importante y lo pudimos hacer.
-¿Cómo reaccionaron en los últimos minutos luego de que Madigan errar el penal para empatar?
-Fue en el momento más duro, aparecieron un par de dudas, pelotas que se cayeron. Lo más importante ahí fueron los cambios. Sentimos una inyección anímica enorme que nos dio energía para jugar los últimos 15, 20 minutos de otra forma. Estuvimos en momentos muy difíciles, pero se terminó ganando por 23 puntos. Entonces eso demuestra que estamos por el buen camino.
-¿Qué fue lo mejor de los Pumas?
-La eficacia en ataque. Cada vez que logramos encontrar el espacio marcamos puntos y eso fue muy importrante. Y la defensa volvió a aparecer. Los tackles abajo. Nosotros sabíamos que así, si no cometíamos penales, ellos no nos iban a lastimar.
-¿Qué hablaron que debían mejorar en el entretiempo?
-La consigna principal era ganar el contacto. Ganar el uno a uno era muy importante. Ellos se hacía fuerte a partir de eso. Eso se pudo hacer: en defensa el primer tackle abajo y el segundo enlentecer la pelota y creo que se pudo hacer los 80 minutos.
-¿Cuándo sintieron que lo tenían ganado?
-Después del try de Juan Imhoff nos sentimos ganadores. Cuando ellos tuvieron un penal para empatar fue el momento más duro. Los cambios ayudaron muchísimo y fueron un apoyo grande para los que estamos adentro medio cansados.
-¿Soñabas ganar haciéndole 40 puntos a Irlanda?
-Firmaba ganar por uno. Es algo lindo y más haber ganado por esa diferencia.
-¿Qué aprendieron luego de la derrota con los All Blacks en el debut?
-Ese día el equipo pese a haber perdido se llevó una muy buena sensación y una confianza interna que nos ayudó muchísimo para los otros partidos. Por ahí nos marcó, pese a no haber ganado.
-¿A qué adjudicás tu buen momento con el pie?
-Es muy importante la efectividad de los pateadores. Te marca ganar o perder un partido, entonces dentro de mi cabeza sé que hay que entrenarse mucho para tener la mejor efectividad posible.
Por Alejo Miranda (Desde Cardiff)
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Créditos: Rodrigo Vergara – UAR
