Los Mayuatos vencieron a San Juan por 37 a 14 con una actuación consagratoria de Martín Núñez.
Salta sigue siendo de primera. Con la victoria de ayer ante San Juan por 37 a 14, el equipo dirigido por Oscar Bazán logró conservar la categoría y cerró su participación en el torneo, con tres victorias en cinco partidos para ocupar el séptimo lugar en la tabla. Un dato que es curioso: Santa Fe, fue cuarto con 1 victoria en cuatro partidos.
Si bien los números marcan que Salta hizo méritos suficientes para quedarse en la categoría, el proceso fue muy duro mostrando muchos altibajos en el desarrollo. Apuntar a ser semifinalista y terminar jugando el descenso no es motivo de alegría ciertamente.
Los últimos 20 minutos de juego, Los Mayuatos justificaron su continuidad en la zona campeonato -el 2008 será su quinta temporada consecutiva-. Martín Núñez se erigió como el salvador de un equipo que hasta ahí perdía 17 a 15 y estaba en el descenso. El wing marcó tres tries de otro partido, facilitando además en dos de ellos la patada de José Correa, tras anotarlos bajo los palos.
Núñez, quien asentó por lo menos un try en todos los partidos que jugó, pasó todo el primer tiempo pidiendo la pelota y nunca la pudo obtener clara. Los gestos de disconformismo del juvenil de 19 años al final del primer tiempo, era el resumen de lo que había dejado los 40 minutos iniciales.
Salta retrocedió en el scrum, en el maul, en el ruck, perdió en el line out y era impreciso en el juego de manos. Cada minuto de juego escribía una nueva página en el manual de lo que no se debe hacer para ganar un partido, y en esas líneas los forwards tuvieron el mayor número de capítulos.
Pensar que la mayor parte del año, estos jugadores se golpean con los forwards tucumanos es anticipar un juego fuerte de los "gordos". Pero ayer fue todo lo contrario. Salta retrocedió. Le marcaron dos tries de maul y si no hubiese sido por la convicción a la hora de atacar, el final del primer tiempo debía tener a los sanjuaninos con 17 puntos de ventaja y no con dos como terminó.
El segundo tiempo Salta siguió en la indecisión. San Juan chocó tanto con sus forwards que faltando 20 minutos para el final, las piernas le pasaron factura de las 26 horas de viaje que tuvo para llegar a Salta. El bajón sanjuanino fue aprovechado por Martín Núñez quien comenzó a recibir la pelota, y el juvenil hizo de la defensa cuyana, un festín.
Salta sigue siendo de primera. Tiene al tryman del torneo. Ganó tres partidos de los cinco que jugó, pero hay mucho para trabajar todavía.
Hay mucho para trabajar
Terminó el partido. Salta se quedó en primera y la mayoría de las felicitaciones fueron para Martín Núñez y para Oscar Bazán, el DT del seleccionado. "¿Seguir?… primero voy a descansar. Fueron cinco semanas de pura tensión. Fueron partidos donde 12 jugadores nuevos se recibieron de Mayuatos y eso es muy positivo. Este proceso fue para ellos. Para el futuro que estamos armando en este grupo. Fue difícil pero mañana vamos a encarar la nueva etapa con más trabajo, porque todavía hay mucho por hacer", señaló el técnico quien ya está elaborando en su cabeza la temporada 2008.
El que ratificó toda su confianza en el grupo fue el mismo presidente de la URS, Ricardo Pasarell. "Este equipo es la base del seleccionado que veremos los próximos años. Estamos conformes y sabemos que estamos por el buen camino", dijo.
El más crítico de los integrantes del cuerpo técnico fue Osvaldo Lico. "Acá tuvimos un plantel en febrero y terminamos con menos jugadores el último partido. Hay que enseñarles que todos son necesarios, jueguen o no jueguen. Por ejemplo ayer pusimos a Martín Otero (wing) como tercera línea porque hubo gente que se fue. Nos falta crear conciencia de grupo y que de una vez por todas, vamos todos para el mismo lado", señaló Lico. Estas palabras las ratificó Mario Uriburu
"La interna de los clubes también las traen al seleccionado, y eso se debe acabar", expresó. Internas de un seleccionado donde hay mucho para trabajar todavía, si se quiere estar entre los cuatro mejores del Argentino.
Fuente: Diario El Tribuno