En la antesala a la gran final que disputarán el próximo sábado en Christchurch, Scott Robertson elogió el gran presente que atraviesan los Jaguares y dijo que deberán lidiar con la presión de enfrentar a un equipo sumamente intenso desde lo físico. “Tenemos una buena idea de los buenos que pueden ser”, deslizó el head coach.
Satisfecho por el rendimiento alcanzado por su equipo el último fin de semana ante Hurricanes y buscando coronar otra excelente temporada, Robertson dejó ver su preocupación por las lesiones de Ryan Crotty y Scott Barret.
“Son jugadores importantes para nosotros. Tendremos que esperar los resultados, así que ya veremos”, explicó el entrenador que también se mantuvo en alerta por el estado de forma de Richie Mo’unga, quien recibió un golpe tardío de Dane Coles que el cuerpo técnico entendió que ameritaba para una sanción adicional de parte del TMO.
En esa línea y sin dejar ningún detalle librado al azar, Robertson reveló que esperaba que los Jaguares derrotaron a Brumbies cruzando sus destinos en la gran definición del próximo sábado. “Hicimos un poco la tarea por anticipado. Esperábamos jugar contra ellos y por eso ya estuvimos planeando el partido, aunque todavía quedan unos días por delante”, contó.
Y luego destacó sus fortalezas: “Los Jaguares son brutalmente duros y cuando estuvieron de gira en Nueva Zelanda tuvimos una idea de los buenos que pueden ser. En el breakdown imponen su rigor físico y cuentan con suficientes jugadores de test para entender cómo jugar en el nivel más alto y lidiar con los momentos de presión. Va a ser otro gran partido para nosotros”.
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