El crack neozelandés de Blues y de los All Blacks fue autorizado para jugar para un pequeño club ubicado sobre la colina Pukekohe en la zona de captación de Counties Manukau.
El back estará disponible para los próximos dos encuentros de los “Ponies”. La presencia de Williams será un gran impulso para Ponsonby, campeones del Escudo Gallaher, pero también para el rugby del club de Auckland en general.
Sonny Bill sufrió una temporada difícil y con lesiones que lo restringieron a sólo tres partidos como titular en Blues: su última aparición ante los Hurricanes en Wellington el 15 de junio después de un descanso de 10 semanas después de una cirugía de rodilla.
Ahora, podrá jugar al menos dos encuentros en el club neozelandés en donde sumará minutos de cara a la segunda parte del año que tendrá el Mundial de Japón como atracción principal.
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