La derrota de Jaguares frente a Reds del último sábado significó la décima en 18 partidos del equipo argentino jugando como local en un escenario donde no logró, en dos años y monedas de participación en el Súper Rugby, hacerle sentir la localía a sus invitados.
Ni el público, ni los cambios de horario, ni el agotador viaje que tienen las franquicias de Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda y la japonesa fueron factores que jugaron a favor de Jaguares en la construcción de su fortaleza en Liniers, donde los de afuera puedan sentirse realmente preocupados.
Lo que se suponía, antes de la primera experiencia en 2016, podía ser una ventaja a la hora de sumar puntos en casa, no sucedió y los números indican que los argentinos perdieron más partidos de los que ganaron en Buenos Aires: 10 contra 8. El más reciente, el último fin de semana ante Reds, a quien había vencido -también en Vélez- en 2017.
La primera temporada en el José Amalfitani terminó con saldo negativo para Jaguares, que en sus dos primeros partidos perdió por poco con Chiefs (26-30) y Stormers (8-13) y cuando regresó sin sonrisas de tres semanas en Nueva Zelanda y una en Japón se desquitó a puro try y logró su primera alegría -y la más contundente- ante Kings por 73 a 27. Después, habría triufos ante Bulls (29-11) y Lions (34-22) y tropezones con Sharks (22-25) y Highlanders (8-34).
El año pasado, los números levantaron en el comienzo del torneo y luego de las dos primeras fechas en Sudáfrica, Jaguares ilusionó con tres victorias consecutivas en Vélez frente a Lions (36-24), Cheetahs (41-14) y Reds (22-8), pero al regreso de su segundo viaje a la tierra de los Springboks, todo cambió.
Porque aquel equipo que lucía firme y sólido se desvaneció tras un duro revés con Sharks (25-33) y una trabajada victoria sobre Sunwolves (46-39) y no volvió a sumar ante su público: los que se llevaron los puntos de Buenos Aires fueron Force (6-16), Brumbies (15-39) y Kings (30-31).
Dos partidos perdidos, frente a Hurricanes (9-34) y Reds (7-18), y uno ganado ante Waratahs (36-26) es el balance hasta ahora para unos Jaguares que se preparan para ratificar su paternidad ante Lions en casa antes de recibir al último campeón, Crusaders, tras la semana de descanso. Bulls y Sharks llegarán en mayo y Stormers a fines de junio para intentar mejorar unos números que, por ahora, dan en rojo.
Por: Christian Gómez Csher
Créditos: UAR/Gaspafotos
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