El próximo 6 de Febrero se dará comienzo a un nuevo Torneo de las Seis Naciones. A continuación te mostramos toda la historia del mismo.
El actual Torneo VI Naciones, que primero fue el Cuatro Naciones y después el Cinco Naciones, denominación con la que ha pasado a la historia del deporte, no sólo es una de las citas más prestigiosas del deporte internacional en la actualidad, sino que es el torneo más antiguo del mundo. Y es que para encontrar la génesis de esta espectacular competición hay que remontarse dos siglos atrás, cuando en la década de los setenta de la décimonovena centuria, concretamente en 1871, Inglaterra y Escocia se enfrentaron por primera vez y dieron paso a lo que luego se convirtió en un torneo cuadrangular entre las cuatro selecciones británicas.
De hecho, fue en 1882 cuando Gales e Irlanda se unieron y las Home Unions decidieron jugar bajo la modalidad de todos contra todos a un solo partido y alternando cada año la condición de local, así que un año después comenzó el primer Torneo de las Cuatro Naciones. Inglaterra y Escocia dominaron las primeras ediciones, pero en 1890 los galeses desarrollaron y pusieron en práctica un novedoso sistema que alteraría el rugby en aquella época. Esta novedad consistió en jugar con cuatro tres cuartos. Así en 1893 los galeses conquistaron por primera vez el Torneo y el ‘trofeo invisible’: la Triple Corona.
Por culpa de las disputas políticas, que eran muy habituales por aquel entonces, el Torneo se vio interrumpido en las ediciones de 1885, 87 y 89. En esta última ya no participaba Inglaterra, que en 1888 había rechazado su participación como miembro de la International Rugby Board. Regresó poco después.
En la primera década del siglo XX, País de Gales fue el equipo a batir. Los ‘dragones de Cardiff’ permanecieron invictos en casa desde 1900 hasta 1913, conquistando el título en seis ocasiones, justo antes del nuevo resurgir de Inglaterra después de que en 1910 se fundase la Rugby Football Union en Twickenham. El primer encuentro que se disputó en Twickenham significó la victoria de Inglaterra sobre Gales y el anuncio de una nueva época dorada para el quince de la rosa. El récord se prolongó hasta 1926 cuando Escocia fue el primer equipo que logró batir a Inglaterra en su estadio. En esos años Inglaterra había conquistado el Grand Slam en cinco ocasiones. Escocia ganó el primero en 1925 con una decisiva victoria ante Inglaterra en el primer encuentro disputado en el nuevo campo de Murrayfield.
Francia, que había entrado en el Torneo en 1910, fue la encargada de acuñar con su irrupción el término de ‘Cinco Naciones’ a mediados de los 20. Pero en 1931 fueron expulsados por ser acusados de ‘profesionalismo’ y de excesiva violencio. Volvieron a ser admitidos en 1939 pero, al igual que sucedió entre 1915 y 1919, el torneo fue interrumpido por la Guerra Mundial. En la Primera gran guerra murieron un total de 111 jugadores. El período ‘entre guerras’ se tiñó del blanco de la rosa, que arrasó a sus rivales y se llevó nueve campeonatos, incluidos cuatro Grand Slam. Francia progresó y se asomó al título en 1930, pero Inglaterra se lo arrebató en el último suspiro. Un año después se retiró del mismo debido a las circunstancias políticas.
La reaparición del Torneo V Naciones en 1947, tras la Segunda Guerra Mundial, que paró del 40 al 47, coincide también con el abrumador dominio el rugby francés. Desde entonces hasta ahora el torneo se ha venido disputando ininterrumpidamente y con la participación de las cinco naciones excepto en 1972, cuando Gales y Escocia se negaron a jugar en Irlanda debido a la tensión política existente en ese momento en Irlanda del Norte. En 1959, Francia lográ por primera vez conquistar el Cinco Naciones. Lograron en esa época cuatro títulos consecutivos hasta que en 1968 llegó el primer Grand Slam para Francia.
De 1969 a 1979 se vivió la que es conocida como la segunda edad de oro del rugby galés. Aunque también en esa época, concretamente en el año 1973, el torneo finalizó con un curioso quíntuple empate. Fue la época de aquellos jóvenes de patillas pobladas que hicieron enloquecer a los aficionados galeses de la mano de los míticos Gareth Edwards y JPR Williams.
En la década de los 80 llega el rugby champagne con el que Francia, liderada por el mítico zaguero Serge Blanco, logra seis títulos. En esta época de dominio galo se coló la Inglaterra del mítico segunda línea Billy Beaumont, que lideró un Gran Slam en 1980, y la Escocia de los hermanos Hastings que, después de esperar 59 años, volvieron a conquistar un Grand Slam en la edición de 1984.
El Torneo pasa a ser campeonato en 1993, acabándose la posibilidad de que más de un equipo pueda alzarse con el título. Desde entonces existe una clasificación oficial, en la que los empates se dirimen por diferencia de tantos o por mayor número de ensayos conseguidos. Ya no habrá títulos compartidos y se entregará un trofeo al campeón.
Por último, en el año 2000 se produce la última gran novedad, la inclusión de Italia con lo que el torneo pasa a denominarse Torneo Seis Naciones. Los transalpinos logran la victoria en su debut ante Escocia, sorprendiendo a propios y extraños, aunque a partir de ahí encandenaron catorce derrotas consecutivas hasta que en el 2003 volvieron a saborear el triunfo. Esta vez ante País de Gales y también en el partido inaugural. Luego, eso sí, seis derrotas seguidas más hasta repetir alegría el año pasado ante los escoceses. Es decir, que los transalpinos llevan dos años sin sufrir la Cuchara de Madera… todo un logro. Su próximo reto, ganar dos partidos en una misma edición y estrenar su casillero lejos del Estadio Flaminio de Roma.
Fuente: marca.com