El jugador de 33 años ha disputado 92 partidos con su país hasta la fecha y ha jugado cuatro tests con los Lions en dos giras. El año pasado representó a Kubota Spears en Japón.
Hizo su debut contra los Barbarians en 2012 y su última aparición con la camiseta de Gales fue en el verano contra Sudáfrica en Twickenham y en los dos test ‘down under’ contra Australia.
Se unió por primera vez a Saracens en 2017 y en la temporada 2019-20 ayudó al club del norte de Londres a completar el doblete de Premiership y Copa de Campeones de Europa.
“Las últimas semanas han sido un torbellino para mí, sinceramente. Mi esposa embarazada y yo tomamos recientemente la difícil decisión de no volver a Kubota Spears para una segunda temporada, un club que me recibió tan cálidamente hace 12 meses después de la Copa del Mundo”, dijo Williams.
“Uno de los directivos del Sarries contactó con mi agente para ver si estaría interesado en terminar la temporada con ellos debido a las lesiones dentro del plantel, y no tardé mucho en decir que sí”.
“Disfruté muchísimo de mi etapa anterior en el club. Fue un momento especial tanto para mi carrera como para el club, ya que gané múltiples trofeos, y la cultura única del club me marcó”.
“No veo la hora de unirme al equipo, después del nacimiento de mi primer hijo, y ayudarlos a lograr sus objetivos”.
El director de rugby de Saracens, Mark McCall, se complace en traer a Williams de regreso al StoneX Stadium para una segunda etapa.
“Liam tuvo un impacto increíble en nuestro grupo, tanto dentro como fuera de la cancha, durante su primera etapa en Saracens. Es un jugador de clase mundial que ha estado en la cima de su juego durante más de una década”, dijo McCall.
“La oportunidad de traer a Liam de vuelta al club fue una obviedad para nosotros y estamos ansiosos por verlo nuevamente con la camiseta de los Saracens”.
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