Antoine Dupont es el jugador más publicitado de Francia, incluso del mundo. ¿Habíamos visto alguna vez un fenómeno de esta magnitud en torno a un jugador francés? Quizás no hasta ese punto, pero sí. Y se trataba de una figura convertido desde entonces en entrenador y que actualmente trabaja en el equipo de Stuart Lancaster en el Racing 92: Frédéric Michalak.
Michalak fue el favorito del rugby francés en la década de 2000, y en ese momento pudo experimentar la cobertura mediática a la que se enfrenta ahora Antoine Dupont. Por tanto, sabe, como confió a Rugbyrama, lo opresiva que puede ser esta situación, tal vez incluso peligrosa para los jugadores.
“Una vez que somos destacados de esta manera con Antoine porque hemos multiplicado los buenos resultados, ya casi no tenemos derecho a cometer errores. Y las redes sociales no ayudan en nada”.
“El problema cuando estás sobreexpuesto es que si no te destacas todos los fines de semana, el gran público piensa que algo anda mal contigo, que no estás en buena forma, en buena forma… La dificultad está ahí. .. Y se suma a la presión de las redes sociales”.
“Puedes tener el mejor séquito del mundo, no puedes filtrar lo que se dice de ti en las redes sociales… Y todo eso es violento… A mí también, hace poco me paso algo con cosas en plena cabeza por motivos políticos o otras razones”.
“Por ejemplo, me insultaron porque defendí públicamente a mi hermana, que está velada por su elección y merece vivir en una sociedad donde todos sean iguales”.
“En las redes sociales hay gente que sólo está ahí para hacer daño y eso es difícil de filtrar… A veces, hasta me pregunto por qué estoy ahí…”
“¿Cómo puedo intentar alejarme de todo esto? Ante esta locura de las redes que puede ser muy positiva o todo lo contrario”.
Para Michalak, está es la solución: “Los jugadores más expuestos sólo necesitan entender que todas estas personas que derraman su odio en las redes sociales no encarnan ninguna realidad. La realidad es la familia, el club, los amigos y el equipo” . Quizás sea más fácil decirlo que hacerlo… Incluso si tiene toda la razón”.
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Créditos: rugbyrama.fr