El entrenador de Waratahs, Michael Cheika, reveló que los Crusaders cometieron un gran error en consultar sobre la decisión de jugar el partido del sábado en el ANZ Stadium.
“En la preparación para para la final del Super Rugby, los Crusaders sugirieron jugar el partido en Homebush aludiendo que era un estadio común – que fue el mayor error que podría haber hecho”, dijo el martes el técnico de Waratahs al nz.sports.yahoo.com.
“Podríamos haber jugado en Taree, en Lismore, Dubbo, Bathurst – uno un grupo de jugadores propusieron jugar en Anzac Parade, ya que haberlo hecho en Homebush, con 62.000 personas allí, fue lo que realmente hizo la diferencia porque tuvimos todo el público a nuestro favor”.
“Como jugador, como entrenador, la emoción que se obtiene cuando uno está siendo apoyado por sus fans y su ciudad natal es absolutamente indescriptible y te empuja a hacer cosas que no haría normalmente. Y creo que eso es lo que nos pasó en la noche del sábado. Ese paso extra de metros que consiguió Bernard Foley en la última jugada fue probablemente debido a la multitud que nos brindó un apoyo incondicional”.
“Fue una experiencia increíble.”
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