No hay paz en Welford Road. La derrota del último fin de semana ante Newcastle (28-25) dejó severamente comprometido el destino de Leicester, en la campaña de bautismo de Marcelo Loffreda como head-coach.
No hay paz en Welford Road. La derrota del pasado fin de semana ante Newcastle (28-25) dejó severamente comprometido el destino de Leicester, en la campaña de bautismo de Marcelo Loffreda como head-coach. Con sólo un compromiso por delante, el multicampeón inglés, defensor del título en la Guinness Premiership, está 6º y puede quedar afuera de las semifinales, pero también puede perder su plaza en la próxima Copa de Europa, si no termina entre los seis mejores.
Esta situación jaqueó, al menos por los fuertes rumores que circulan, el porvenir de Loffreda. Se habla de despido, se menciona la posibilidad de quitarle protagonismo en la toma de decisiones, pero la realidad es que no hay nada concreto sobre lo que pasará con el ex técnico de los Pumas, cuyo contrato expira en dos años. "Estoy haciendo todo lo posible para seguir en el cargo. Se habla mucho en este club, donde está casi prohibido perder. Mi futuro es seguir con mi contrato, por el momento no pienso en otra posibilidad. Pero si la otra parte piensa otra cosa, está en ellos. Al equipo todavía le queda una oportunidad y voy a seguir trabajando y luchando para cumplir con mi acuerdo. Acá hubo muchos rumores de la prensa, pero eso no lo puedo evitar. Te repito, mi intención es hacer todo para continuar en el club, aunque, por supuesto, la decisión no es sólo mía. La palabra la tienen ellos [por los directivos]", explicó ayer el Tano en diálogo con LA NACION.
Al margen de la presión, Loffreda habló de cómo evalúa esta nueva experiencia: "Estoy conforme por el hecho de haberme involucrado en un medio completamente distinto. La posición de head-coach es muy exigente. Llevo cinco meses y medio en el puesto, me sumé a mitad de temporada y hubo muchos cambios, lesiones y eso provocó un estado de inconsistencia".
Loffreda podría no ser despedido, pero sí se lo distanciaría de la conducción del plantel. Sin embargo, eso no es contemplado por el hombre del SIC: "No voy a dejar de ser el head-coach. Lo que pasa es que no hay un entrenador de backs, me ocupaba yo de eso, y como no podía con tantas cosas, pedí a alguien para ese puesto. Esa es la persona a la que están buscando".
Los Tigers poseen 59 unidades y están detrás de Wasps (60), Harlequins (61), Sale (63), Bath (68) y Gloucester (70). Wasps debe jugar un cotejo pendiente con Newcastle, y Leicester debe ganarle con bonus a Harlequins el próximo sábado y ver qué sucede con el choque Sale vs. London Irish.
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