La naturaleza tiene esa manera de hacer lo que cree necesario en cada momento. Juan Martín Fernández Lobbe ya tenía previsto, y hablado con el Huevo Hourcade al empezar la temporada del Rugby Championship, dejar el plantel de Los Pumas una semana antes del fin del torneo.
El inminente nacimiento de su segundo hijo lo había hecho prever el temprano regreso a Toulon para estar para recibir a Jaime, hermano menor de Felipe. Solo confiaba, rogaba, que esperara hasta el lunes 29.
El miércoles pasado a media mañana, en el día libre para Los Pumas, sonó su teléfono. La bolsa de su mujer se había roto y el nacimiento sería esa noche. Lo siguió a la distancia, entre celebrando y definiendo si volvía y se perdía el partido contra los All Blacks.
Con el recién nacido bien cuidado por madre y abuela, Corcho decidió entonces mantener el itinerario original, darse el gusto de volver a jugar contra los All Blacks y luego sí, conocer a Jaime. Antes de todo esto, habló con Al Rugby.
Estamos bien, no me gusta comparar, arrancó cuando se le pidió que compare la actualidad de Los Pumas con como estaban las cosas un año atrás. Diferente equipo, diferente circunstancias, diferente staff. Analizando este año, estamos bien, somos un equipo bastante completo y es importante que seamos muy concretos y constantes en todos los partidos. Hemos dado un paso adelante pero claramente todavía falta. Faltaría mucho una victoria, dice quien probablemente fue el mejor Puma en la derrota contra los All Blacks.
Falta seguir compitiendo a este nivel porque son los tres mejores; uno toma el ejemplo de Salta, en que uno pensaba que Sud-áfrica estaba claramente vencido. Después vez que no, que ellos siguieron con la misma presión, la misma idea, la misma constancia durante los 80 minutos y terminan dando vuelta el partido. Eso es experiencia, afirma Corcho.
Para ganar, hace falta ser muy clínicos y precisos en esos momentos tan importantes, tan vitales que tiene cada partido. En un partido uno tiene momentos malos, momentos buenos. Entonces saber aprovechar los momentos buenos y saber entregar la menor cantidad de puntos en esos momentos malos. Sobre todo a este nivel vas a tener siempre momentos de presión y agobio del rival. Es eso, seguir aprendiendo a controlar y tener protagonismo durante todo el partido. Dicho esto antes del partido contra Nueva Zelanda, quedó claro qué fue lo que falló en La Plata.
Consolidado tras once temporadas en el seleccionado y siendo uno de los líderes naturales, le dolió perder la capitanía. Duele. Me gustaba ser capitán de los Pumas, era una tremenda responsabilidad, un lindo reconocimiento, un honor y un orgullo. También sée que al capitán de Los Pumas siempre lo determinó el entrenador y que Daniel (Hourcade) llegó con un staff nuevo y decidió apoyarse en Agustín, dice, mientras reflexiona: Tendrá mayor grado de fluidez en la conversación y en la charla con él. Sentía que era su capitán y me parece perfecto. Así debe ser. Estamos apoyando a Agus en todo lo que debamos y todo lo que podamos.
Hubo muchas cosas extra rugbísticas que se hablaban semana a semana y además yo sentía que el equipo no estaba rindiendo en la cancha; la imagen del equipo se seguía dañando y dañando y uno se sentía en gran parte responsable.
Respecto a su rol en la actualidad, cuenta que en la parte de entrenamiento y de cancha creo que mis responsabilidades deben seguir siendo las mismas por la posición que me toca ocupar, por veteranía, experiencia y por como vivo el rugby, es mi forma de ser. Fuera de la cancha hay un montón de cosas que no tengo que hacer y me da mas tiempo libre. Puedo estar tirado en la cama, hablando con amigos… eso evidentemente te relaja. No me ha quitado ni un grado de presión o ganas de que el equipo en la cancha vaya hacia el sentido correcto.
Me gusta lo que estamos jugando; con un buen esquema, que nos permite tener la iniciativa del partido y lastimar y sumar puntos. El Huevo es un fanático del rugby. Es un amante del rugby y del rugby ofensivo.
Para Juan Martín Fernández Lobbe, que recién el lunes pudo conocer a su segundo hijo, estamos en el buen camino pero vamos a estar mejor cuando podamos revalidar esto con un triunfo.
Por: Frankie Deges
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