Gonzalo Quesada, head coach de Jaguares, fue entrevistado por “El Hincha”. El ex apertura no dejó ningún tema sin abordar, ve difícil la vuelta pero tiene esperanza y no tiene preferencia por un formato. El entrenador reparte su tiempo en tareas laborales, lectura y ejercicios en el patio de su casa.
El cumplir con el aislamiento también puede ser un buen momento para hacer ese laburo de introspección, de analizar dónde estamos parados y dónde proyectamos estar en el futuro, ponerse al día con muchas tareas no solo laborales sino también personales. Hoy por hoy, Gonzalo Quesada, head coach de Jaguares, divide el día en dos: trabajo por un lado y lo personal por otro.
La agenda que lleva Quesada desde que regresó al país ha frenado muchas actividades que la rutina hace que se pongan en la lista de “no prioritarias”. Y en medio de un break el hombre que llevó a Jaguares a jugar la final del Súper Rugby le confiesa su presente a El Hincha.
“Como en toda crisis siempre hay una oportunidad. Es un momento en el que podemos mostrar una gran solidaridad entre todos y poner la salud de nuestro país como prioridad, intentar quedarnos lo más encerrados posible, que esta crisis sanitaria pueda ser controlada por el sistema de salud argentino. Es un oportunidad para todos, para reflexionar, proyectarse en el futuro, ver dónde está uno parado, ver todos esos aspectos de la vida de uno, donde el trabajo y la vorágine de los objetivos profesionales va llevando a uno a dejar de lado otros aspectos; entonces es un buena oportunidad para parar la pelota, hacer una pausa, y ver todos esos temas que muchas veces se postergan. Muchas familias van a poder estar más tiempo juntas. Reubicar las energías, en mi caso, ponerme al día con algunas lecturas que para mí son apasionantes, y que me permiten seguir formando y abriendo la cabeza, y en lo laboral acomodar ciertos aspectos que necesitaban ser acomodados. A guardarse y cuidar al resto de la población, y hacer el laburo de introspección que creo es fundamental para todos”, se escucha desde el otro lado del teléfono a Gonzalo Quesada.
No es fácil atravesar el aislamiento y más para personas que suelen desarrollar gran parte de sus tareas fuera de casa, y aparecen nuevas rutinas. “Llevamos una semana entera de aislamiento; el lunes pasado, la dirección médica de la UAR decidió cerrar Casa Jaguares, y le recomendó a todos los jugadores, más allá que no había decreto de aislamiento preventivo, quedarse en sus casas, y al staff también. Llevamos siete días completos, los médicos de Jaguares decidieron anticipar. En estos días estoy aprovechando para acomodar un montón de información que tenía acumulada en la computadora, todos esos temas de trabajo que estaban en poco desordenados, empezar a ordenarlos, y planificar hacía el futuro, estoy leyendo todo lo que tenía atrasado de lectura, que es algo que me apasiona también, relacionado con la parte ligada a la gestión de equipos, liderazgo, a la parte fisiológica y de recuperación, u otros temas. Esa es un poco mi rutina, a la mañana trabajar en la computadora y a la tarde leer, y tengo la suerte de tener casa con jardín y a la tarde trato de salir y hacer un poco de ejercicios, todo lo que se pueda para no estar tan encerrado”, dijo Quesada.
Y rápido agregó: “Estoy preocupado por el futuro, esto es muy groso, pero yendo a mi trabajo específico sabiendo que se trabaja dentro de Sanzaar para de alguna manera terminar el Súper Rugby 2020, por ahí dividiéndonos por zonas, se que trabaja mucho en ese sentido. Nuestros jugadores ya llevan una semana casi sin entrenar, con planes para hacer dentro de sus casas o departamentos, pero algo limitado, esperando a ver cómo sigue todo, y obviamente respetando a rajatabla el hecho de encerrarse y tratar de frenar un poco la locura”.
Aunque sólo fueron seis partidos en la temporada 2020, Quesada se anima a posar la lupa en lo hecho por la franquicia argentina: “El balance 2020 venía bastante cerca de lo planeado, hicimos una muy buena pretemporada, dos meses de preparación excelentes, con mucho compromiso, trabajando tanto en la parte física con muchísimo rugby, donde cambiamos por completo el sistema de ataque, y modificamos algunas de las bases de nuestro sistema defensivo. Se arrancó con tres buenos partidos de local, ganándole a Lions con punto bonus, con setenta buenos minutos para mi gusto con Hurricanes, que lamentablemente en los últimos diez minutos nos metieron dos tries muy simples, y después una muy buena remontada con Reds, ganando un partido clave”.
“Después la gira tuvo muchos altibajos, es un gira difícil, tres semanas enteras en Sudáfrica, donde tuvimos que rotar y aprovechamos para dar oportunidades, y hubo buenas y malas con Stormers, una gran victoria sobre Bulls y un partido muy malo contra Sharks. El balance venía según lo previsto, queríamos llegar con la mayor cantidad de jugadores disponibles, sin ningún tipo de saturación y encarar los tres partidos de local que eran clave, habíamos calculado llegar a uno o dos puntos de nuestros competidores en Sudáfrica, y ganando estos tres partidos que habíamos preparado: Highlanders, Stormers y Rebels, de local, nos permitía irnos de gira en una situación muy favorable y con mucha confianza. Lamentablemente lo que pasó fue que primero nos anulen el partido con Highlanders y se decrete un empate injustamente; es difícil hacer un balance un poco más profundo”, evaluó.
De las muchas ideas que circulan, una es la de arrancar directo con playoffs, si es que la suspensión dura más de cinco semanas. “Cualquier idea en la que se pueda volver a jugar es utópica, porque cuando uno ve todas las medidas que se están tomando a nivel país, veo difícil cómo se va a volver a jugar a cualquier deporte, por más que sea sin público. Más allá de eso, sería espectacular que la situación se tranquilice y se estabilice en todo el mundo con esto del coronavirus y que se permita volver a jugar al rugby. Si se puede y podemos salir a la cancha con Jaguares, cualquier formato me parece bien, y me entusiasmaría mucho”, expresó el ex apertura de Los Pumas.
Todos los años posteriores a un Mundial se produce un gran éxodo de jugadores del Sur al Norte, tentados por las ofertas económicas de los clubes poderosos del viejo continente. “La realidad del hemisferio sur y sobre todo en los años post Mundial genera mucho recambio. Algunos pensaron que el nivel iba a bajar, y lo que está buenísimo que esto obliga –en el buen sentido- a todos los equipos a darle oportunidades a los jugadores más jóvenes, de desarrollar y ampliar la base de los distintos equipos y es una gran ventaja que tenemos en el Sur hacía el Norte; allá cada vez llegan más jugadores consagrados de distintas nacionalidades, y esos jugadores bloquean la posibilidad de que aparezcan jugadores locales, sobre todo en Francia e Inglaterra, pero yendo a Argentina es durísimo ver a jugadores experimentados y en una edad en la que pueden estar en su mejor nivel irse de Jaguares a Europa. Pero esa mala noticia genera una buena de darle la posibilidad de dar oportunidades y acompañar en el desarrollo a jugadores más jóvenes, con mucho talento y potencial. Sinceramente con todo el staff disfrutamos mucho ese trabajo y proceso de tomar un jugador joven con potencial e ir acompañándolo para prepararlo para jugar en el más alto nivel”, dijo Quesada.
Ante tanto éxodo, hubo un gran regreso. Warren Gatland, dejó Gales para ser el entrenador de Chiefs, en Nueva Zelanda, generando un gran revuelo en todo el Súper Rugby. “Se sabía y todo el mundo es consciente de que el Súper Rugby es el torneo más competitivo del mundo, más allá de los seleccionados, y dentro de todas las posibilidades que ha tenido un tipo como Warren Gatland, que haya elegido volver al Súper Rugby es una muy buena señal. Nueva Zelanda está perdiendo fuerza en este tipo de torneo y este tipo de señales es muy positiva para el Súper Rugby y en Nueva Zelanda sobre todo. Y para nosotros, los otros entrenadores, los que estamos en la búsqueda de mejorar, de aprender, de inspirarnos, esta buenísimo contar con ese tipo de rivales directos, donde uno tiene que dar lo mejor de sí mismo para enfrentarlos y es una buena oportunidad para analizar sobre lo que se es
tá haciendo en sus equipos para inspirarse y aprender”, expresó Quesada.
El Súper Rugby es una competencia que no perdona, en 2020 en seis partidos hubo muchos debuts en Jaguares. “Es uno de nuestros objetivos y en Jaguares uno es preparar el equipo para jugar a un gran nivel de rugby, tener una gran defensa, una buena obtención, jugar un rugby eficaz, atractivo, que sea un rugby de ataque y de movimiento, intentando que ese sea el camino para obtener resultados, y por otro lado el objetivo es muy claro: incorporar la mayor cantidad de jugadores, dar oportunidades, generar las condiciones para aparezcan nuevos jugadores, y pulir ese potencial, acompañar a esos jugadores técnicamente y físicamente, sobre todo en la comprensión y lectura del juego, para que accedan lo más rápido posible al nivel de Súper Rugby, y que ese camino les permita para postular para el seleccionado nacional. Jaguares debe ser un proveedor natural de jugadores para Los Pumas, y cuanto más en alto nivel tengamos será mejor para Jaguares y mejor para Los Pumas”, dijo el máximo responsable de Jaguares.
Quesada justificó con un ejemplo la convicción que tiene su staff: “Más allá de la presión que uno sentía por obtener resultados a toda costa y a corto plazo, esta gira por Sudáfrica fue el buen ejemplo en la que priorizamos darle la oportunidad de debutar entre otros, a Santiago Chocobares, Bautista Pedemonte, Santiago Grondona y en los partidos previos les tocó a otros. La idea era continuar por ese camino toda la temporada, ir al mismo tiempo afianzando al equipo; cuando sea que vuelva a jugar Jaguares, salvo que la UAR disponga lo contrario, la filosofía es que este equipo tenga un espíritu e identidad muy clara y le permita a la gente de nuestro rugby y nuestros clubes identificarse con Jaguares”.
Conociendo que es un entrenador estudioso, que está siempre buscando cosas nuevas, Quesada analizó sobre la posibilidad de algunas novedades tácticas hayan llamado la atención en 2020. “Nada muy novedoso, sí lo de siempre: una búsqueda constante de cómo generar situación de sorpresa y que generen quiebres, que es lo que buscamos todos en los ataques, y hay defensas cada vez más densas y más presentes en la primera cortina defensiva, cada vez más jugadores en esa primera línea defensiva, siempre hay algún detalle, pero no vi nada demasiado novedoso”, dijo.
“Lo que siempre aparecen son defensas muy sólidas, y en nuestras cabezas fuerzan las ideas y nos genera un muy lindo laburo a los entrenadores para buscar cómo reorientar nuestros sistemas y este nuevo sistema de ataque que nos ha permitido este año, hasta donde nos permitieron jugar, estar entre el top 3 de equipos con más quiebres y metros recorridos, y también entre los equipos que más tries marcaron; por ese lado estamos contentos y tratando de ser, con toda la humildad, de los equipos que propongan novedades o ideas novedosas dentro del juego”, expresó Gonzalo.
Por Lisandro Olearo
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