La Unión Argentina de rugby por más que al ambiente del rugby no le caiga del todo bien, después del gran tercer puesto del Mundial en Francia 2007, paso a ser una institución deportiva con un tinte corporativo el cual es utilizado por la grandes potencias. CORDOBAXV habló con Guillermo Acananme, actual gerente general de la entidad madre de rugby nacional.
– ¿Qué significa ser Gerente General de la Unión Argentina de rugby?
– Es un desafío enorme ya que consiste en profesionalizar una estructura la cual durante más de 100 años no lo fue en donde todos trabajaban de manera amateur. Durante todo este tiempo el staff de personas que estaba colaborando con la UAR, realizaba acciones en post de lo que iba pasando y no había posiciones gerenciales y en cierta manera, este nuevo proyecto está como emulando a como trabajan las grandes potencias. Estás grandes uniones constan con recursos humanos de carácter empresarial y otro grupo de personas (políticas) que toma una serie de decisiones en donde posteriormente el staff profesional ejecuta.
– ¿Cuáles son tus tareas diarias?
– Desde que llegué a la función comencé a darle forma a la parte presupuestaria. La idea fue realizar presupuestos fehacientes, consensuados, en donde cada área tenga su presupuesto anual, y hoy me lleva mucho tiempo el control presupuestario, como se va realizando y ejecutando. Antes se presentaban porque eran una obligación como parte del estatuto como para presentar en las asambleas. Hoy es un proceso que lleva tres meses en donde cada área presenta sus planes, se lo presupuesta y mes a mes se lo va controlando. Esa es una de las grandes tareas que como Gerente de la Unión Argentina realizo. También estoy involucrado en la organización de los eventos en donde buscamos profesionalizar esta estructura en donde todos nuestros sponsor tenga la exposición que se merecen y que las condiciones que hacen al mismo se cumplan de manera ordenada.
– En una Argentina económicamente hablando difícil, con altibajos en donde uno debe manejar los recursos al máximo para que no den perdidas.
– Hoy por ejemplo la empresa ANDESMAR, es el sponsor oficial del Campeonato Argentino. Teníamos el compromiso firmado en el 2009 y en esta temporada lo pusimos en marcha. Esta empresa de transporte si bien no nos brinda dinero, nos permite poder realizar unos 250.000 km anuales a un muy bajo costo. Antiguamente a las uniones provinciales se le brindaba un subsidio para que pudieran solventar todo lo relacionado al transporte, hoy todos esos kilómetros los tomamos en una bolsa, lo cual es muy positivo para todo el rugby argentino a la hora de trasladarse de una provincia a otra.
– ¿Cómo es la relación económicamente hablando de la UAR con las uniones provinciales?
– La realidad de las provincias es muy dispar y con diferentes realidades. Hay uniones que marcan claras diferencias con el resto como lo son las de Buenos Aires (URBA), Córdoba, Rosario, las cuales están saneadas porqué tienen buenos ingresos mientras que las pequeñas uniones transitan por un presente muy distinto en donde no puede ni siquiera sostener una secretaria porque no poseen fondos para hacerlo. Por este motivo es que la Unión Argentina a las uniones que no se encuentran en buena posición las está subsidiando como para que mínimamente puedan contar con una estructura administrativa como para que se pueda llevar día a día cada unión.
– ¿Se puede tratar a una entidad deportiva como a una empresa? ¿Tienen ciertas similitudes con la estructura de una corporación?
– Lo primero que me dijeron cuando entré a la UAR fue: “Esto no es una empresa, Guillermo”. Por tal motivo pensé, no es una empresa pero se pueden utilizar una serie de parámetros en donde se pueda trabajar de la misma manera a una empresa. Parte de eso es una estructura profesional, de a poco lo estoy logrando con un gerente comercial nuevo, también busco armar una estructura de Recursos Humanos la cual hoy no existe, ya que todas las gestiones de recursos humanos las realizo yo. Todo esto es un proceso en donde el dirigente argentino hoy no está preparado para delegar completamente la administración de la unión, y de a poco uno debe ir enseñándoles el camino. Hoy un dirigente no está acostumbrado a un montón de realidades que se viven en empresas y de a poco van a tener que ir interpretando lo que significa esto ya que a la hora de sentarse a negociar con un proveedor, con un sponsor o con las uniones del mundo, enfrente tiene profesionales que trabajan ocho horas para esto, que están preparados, y si uno va como dirigente amateur está en desventaja. Hoy cuando hay que realizar un acuerdo, debemos hacerlo en igualdad de condiciones (profesionales) para que estemos en igualdad de condiciones.
– Cuándo hace un par de años la Unión Argentina de Rugby envío un mail que decía. “La UAR tiene un nuevo Gerente General”. ¿Cómo crees que fue tomada esta noticia por la comunidad del rugby?
– Yo respeto todas las posiciones. Hay gente que es ultra amateur a la cual yo respeto, de hecho yo jugué al rugby en una estructura totalmente amateur siendo está una actividad que me encantó hacer, y hay otras personas que nos ve como los herejes del rugby que le venimos a sacar dinero del rugby pero bueno creo que son los menos. Después de lo que paso en Francia 2007 (Tercer puesto de Los Pumas), la unión a nivel estructura estaba en deuda y no acompañó lo que pasaba con el equipo. Los Pumas habían logrado el podio y el bronce mientras que la UAR tenía un papel mediocre en la administración y gestión. Todo eso que muchas personas lo veían como un gran déficit que tenía la unión con el nombramiento de un Gerente General lo ve muy positivo.
– ¿Guillermo Acaname es hoy el nexo entre la UAR y la International Rugby Board a la hora de rendir cuentas de lo que se está haciendo?
– Tuve la posibilidad de trabajar en empresas multinacionales y la forma de trabajo es muy parecida en cuanto al sistema de reporte que realiza una filial a su casa matriz que es lo mismo que está haciendo la IRB con Argentina con los fondos. Uno tiene que reportar, presentar un plan aval en donde a partir de un plan estratégico, hay un plan operativo anual y todos los trimestres uno debe enviar un informe de los avances con cada uno de los indicadores. Lo que la IRB nos pide es que si ellos ponen 1 libra, nosotros pongamos 1 libra. El 50 % debe estar financiado por la UAR y el otro 50 % por ellos. Hoy ese equilibrio se está dando.
Por Martín Quetglas
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