Campeón del Seven de Punta del Este en 2004, uno de los equipos más poderosos de la región tanto en las modalidades de VII o XV jugadores dio una nueva muestra de suficiencia. A pesar de comenzar en desventaja, dio cuenta de Tonga por 24 a 7. Campeón del Seven de Punta del Este en 2004, uno de los equipos más poderosos de la región tanto en las modalidades de VII o XV jugadores dio una nueva muestra de suficiencia. A pesar de comenzar en desventaja, dio cuenta de Tonga por 24 a 7.
Es una costumbre, casi como una marca registrada. Los últimos años del equipo de Don Torcuato se han convertido en los momentos dorados. La dinastía del elenco celeste y amarillo amenaza con extenderse y una nueva muestra de ello fue el triunfo ante Tonga.
Porque ahora no solo son clubes a los equipos que Hindú deja en el camino, sino también a un seleccionado como Tonga. Es verdad, quizás el conjunto rojo llegó como uno de los equipos más fuertes y no demostró demasiado. Solo derrotó claramente a Los Troncos y perdió en sus 2 siguientes presentaciones: frente a Old Boys e Hindú.
Tras perder ante los uruguayos en la primera jornada, el capitán del equipo los reunió en ronda y pareció caerles muy duro. Eso hacía pensar en una notable reacción en el segundo día. Pero no fue así. Tonga empézó en ventaja, pero una inconducta le costó una amonestación y todo fue de Hindú.
Primero Hernán Senillosa y luego Bosch, Agulla y Díaz Bonilla se turnaron para visitar el ingoal de Tonga y depositar al elenco de Torcuato en semifinales de la Copa de Oro, el único club que logró semejante privilegio.
Por 7punta.com