Cuando los Regionales se disponían a disputar sus instancias de definición, la UAR cambia las reglas. Desde ahora, los jugadores que regresen de una competencia internacional deberán jugar la fase regular si quieren estar en las instancias finales. No es serio modificar en plena competencia los reglamentos.
Va a llegar un momento en que al tigre no le quede más lugar para una nueva mancha. Días atrás la Unión Argentina sacó una resolución en cuanto a la reglamentación de los pases internacionales, lo que generó sorpresa en todo el rugby criollo. En medio de la temporada, y con los Torneos Regionales en vísperas de definición se cambian las reglas, una desprolijidad más de la Unión Argentina de Rugby.
Resolución UAR tiene fecha del 16 de julio y dice lo siguiente
“Uniones Provinciales: Les hacemos llegar en adjunto el reglamento de pases y registros. En relación al Art. 3.3.26, que el pasado 28 de mayo se suspendiera, les informamos que ésta es la redacción definitiva del mismo:
Art.3.3.26. Todo jugador que habiendo estado registrado en algún club perteneciente a las uniones afiliadas o invitadas de la UAR y, posteriormente, le fue autorizado un pase internacional, ya sea como jugador contratado o no contratado, en clubes, franquicias, academias, universidades o similares, aun cuando estos no sean afiliados o reconocidos por una unión nacional, y desea volver a ficharse en el país, deberá hacerlo en el último club que le autorizó su pase internacional, según el procedimiento indicado en los artículos 3.3.20 y 3.3.21 y contar con la resolución favorable de la UAR.
Aprobado el pase, el jugador podrá participar de la competencia que esté disputando el club que le otorgó el último pase internacional, salvo que la misma se encuentre en etapa de definición, situación que impedirá su participación hasta que finalice.
A los fines del presente artículo se entenderá por etapa de definición, a los partidos que se disputen con posterioridad a la fase regular de los torneos, esto es cuartos de finales, semifinales y finales o liguillas para definir el campeón, como así también etapas reclasificatorias o revalidas que definan la permanencia o descenso de los equipos. Para el caso de que los torneos no prevean etapas definitorias, el jugador no podrá participar de las últimas cuatro fechas del torneo”.
¿Cómo afecta directamente esto los clubes nuestros?
En el Torneo del Litoral, competencia que reúne a equipos de Rosario, Santa Fe y Entre Ríos, le pega de lleno. La gran mayoría de los clubes tomó conocimiento sobre esta nueva resolución el pasado lunes 29 de julio, aunque la fecha de salida de la UAR dice 16 de julio. Aunque hay opositores a la norma, algunos la aceptarían si desde la Unión Argentina de Rugby si la hubieran publicado antes de comenzar los torneos para que aquel jugador que tenga la intención de volver al rugby de nuestro país, sepa cuando puede hacerlo y cuando no. Algo que sonaría lógico, como lo sería conocer las reglas del juego antes de competir. Y si bien desde hace un buen tiempo se viene trabajando sobre el tema, se podría haber pensado para el 2025 y así no afectar el presente.
Desde la irrupción del Súper Liga Americana, la MLR (Estados Unidos) y desde 2023 con el Súper Rugby Américas, una gran masa de jugadores argentinos que compite de manera profesional en el primer semestre, en la segunda parte del calendario rugbístico, muchos vuelven a sus clubes de origen.
En 2024 dos casos llamaron la atención: Ramiro Moyano, ex Puma y con pasado reciente en Yacare XV eligió regresar al rugby argentino en Old Lions de Santiago del Estero, y no en Lince de Tucumán, o el salteño Leonardo Gea Salim, que tras ser campeón con Dogos XV, optó por emigrar a Jockey de Córdoba y no a Universitario de Salta. Igualmente, los jugadores deberían tener la libertad de elegir adónde quieren jugar y no estar atados a tener que regresar si o si a una institución para poner dos claros ejemplos.
En Rosario, esta regla afecta a Gimnasia y Esgrima que pensaba contar con Manuel Covella y Joaquín Horcada, provenientes de Dallas Jackals de la MLR. Ambos jugadores regresan a la institución que los formó, después de haber tenido la oportunidad de jugar en un nivel más alto; y ahora se encuentran con la negativa de poder representar a su club.
Si es por un tema de sacar ventaja en una instancia de definición, la norma podría ser aceptada, siempre y cuando se tenga conocimiento antes de iniciar la competencia.
La dirigencia del rugby, insiste en querer diferenciarse de la del fútbol, que no solo es desprolija, sino que convive permanentemente en la inequidad; pero, sin embargo, cada día se parecen más. Porque cuando les conviene cambian las reglas, como el formato del Torneo del Interior, que se arma en ventanas para 2025, en medio de la competencia Regional, para que los jugadores del sistema de Alto Rendimiento, puedan jugar en el segundo semestre cuando no tienen competencia con las franquicias.
Señores, despierten porque le están haciendo mal al rugby amateur y sus clubes, que son el estamento más importante de nuestro deporte. Sean serios porque no solo deben serlo; sino también deben parecerlo”.
Por Lisandro Olearo
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