Si el entrenador de los All Blacks, Scott Robertson, hubiera tenido la oportunidad de golpear suavemente con sus nudillos la puerta del vestuario del árbitro Andrew Brace en Ellis Park y solicitar una charla después de la derrota por 31-27 ante los Springboks, tal vez hubiera dormido mejor cuando finalmente llegó a su hotel en Johannesburgo.
Robertson podría haberse desahogado con un par de cosas.
El polémico try concedido al hooker de los Springboks Bongi Mbonambi habría encabezado la lista. Tal vez, entonces, Robertson habría obtenido algunas respuestas antes de caer finalmente en su cama. Pero hay un proceso que todos deben respetar. Los All Blacks tienen que esperar a que la entidad madre del rugby mundial responda.
Si Robertson hubiera podido interactuar con Brace antes de subir al colectivo de los All Blacks para el viaje hacia los suburbios de Sandton, tal vez podría haber dialogado con el árbitro y haberle preguntado qué estaba pensando cuando dictaminó que Mbonambi había marcado el primer try de los Springboks.
Robertson dice que no tuvo la oportunidad.
“No, no he tenido la oportunidad de tomar una cerveza o un café con el señor Brace ni nada parecido”, dijo Robertson.
“Es una señal de respeto y un poco de etiqueta al respecto; se enviarán algunos correos electrónicos a World Rugby y pasarán por Joel Jutge”.
“Ése es el proceso normal.”
Jutge es el jefe de árbitros de partidos de World Rugby. La responsabilidad recae en él.
Los All Blacks saben, sin embargo, que cualquier explicación que dé World Rugby no cambiará el resultado. Pero la rendición de cuentas es importante. Los árbitros como todos aquellos que estuvieron presentes en Ellis Park en Johannesburgo, se llevaron una gran sorpresa con esta decisión del referee y el TMO.
Robertson dejó claro en la conferencia de prensa posterior al partido que el error de los árbitros le molestó. No fue el único que se quedó perplejo por la sorpresa de Brace.
Los comentaristas de Sky Sport rápidamente se abalanzaron sobre el error, junto con un puñado de fanáticos de los All Blacks entre las 62.000 personas que llenaron Ellis Park y las multitudes sentadas en casa frente a sus televisores; todos habrían balbuceado lo mismo cuando las repeticiones mostraron claramente que Mbonambi no tenía el control de la pelota cuando quiso apoyar en el ingoal de los All Blacks.
Si Robertson hubiera tenido una conversación extraoficial con Brace, podría haber preguntado si el TMO, Brian MacNeice lo había contactado sobre la separación entre Mbonambi y la pelota.
De no ser así, y dado que MacNeice había intervenido en otros asuntos, se podría asumir con seguridad que estaba satisfecho con que la pelota fue apoyada correctamente.
Hasta que World Rugby se ponga en contacto con ellos, los All Blacks no lo sabrán.
Su tarea, ahora, será concentrarse en el próximo partido del Rugby Championship contra los Springboks en Ciudad del Cabo el próximo fin de semana.
“Esperamos recibir noticias de World Rugby, para ver su revisión primero”, señaló Robertson.
stuff.co.nz
Créditos: sutt.co.nz
La UAR debería aprender de los Allá Blacks y quejarse de los referatos parciales que nos perjudican. No cambiaremos los resultados, pero los referees, comenzarán a ser más imparciales.
Estoy de acuerdo. Una vez en la vida, los árbitros no favorecieron a los all blacks. Esas injusticias las sufren los pumas, desde tiempos inmemoriales, pero nunca quejaron los neozelandeses cuando ellos eran los beneficiados…
Es cierto se está acercando al fútbol el á del rugby siempre cñcae ls sancion. Del lado del poderoso los pumas lo saben m se d que bien